sábado, 7 de noviembre de 2009

ESTA COLOMBIANA VIVE EN UN MUNDO AL REVES...QUE DESGRACIA LA DE ELLA...


La anexión de Colombia a Estados Unidos

Cubadebate...07/11/2009


Cualquier persona medianamente informada comprende de inmediato que el edulcorado “Acuerdo complementario para la Cooperación y Asistencia Técnica en Defensa y Seguridad entre los gobiernos de Colombia y Estados Unidos”, firmado el 30 de octubre y publicado en la tarde del 2 de noviembre, equivale a la anexión de Colombia a Estados Unidos.

El acuerdo pone en aprietos a teóricos y políticos. No es honesto guardar silencio ahora y hablar después sobre soberanía, democracia, derechos humanos, libertad de opinión y otras delicias, cuando un país es devorado por el imperio con la misma facilidad con que un lagarto captura una mosca. Se trata del pueblo colombiano, abnegado, trabajador y luchador. Busqué en el largo mamotreto una justificación digerible, y no vi razón alguna.

En 48 páginas de 21 líneas, cinco se dedican a filosofar sobre los antecedentes de la vergonzosa absorción que convierte a Colombia en territorio de ultramar. Todas se basan en los acuerdos suscritos con Estados Unidos después del asesinato del prestigioso líder progresista Jorge Eliécer Gaitán, el 9 de abril de 1948, y la creación de la Organización de Estados Americanos, el 30 de abril de 1948, discutida por los Cancilleres del hemisferio, reunidos en Bogotá bajo la batuta de Estados Unidos los días trágicos en que la oligarquía colombiana tronchó la vida de aquel dirigente y desató la lucha armada en ese país.

El Acuerdo de Asistencia Militar entre la República de Colombia y los Estados Unidos, en abril de 1952; el relacionado con “una Misión del Ejército, una Misión Naval y una Misión Aérea de las Fuerzas Militares de los Estados Unidos”, suscrito el 7 de octubre de 1974; la Convención de Naciones Unidas contra el Tráfico Ilícito de Estupefacientes y Sustancias Psicotrópicas, de 1988; la Convención de Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional, de 2000; la Resolución 1373 del Consejo de Seguridad, de 2001, y la Carta Democrática Interamericana; la de Política de Defensa y Seguridad Democrática, y otras que se invocan en el citado documento. Ninguna justifica convertir un país de 1 141 748 kilómetros cuadrados, ubicado en el corazón de Suramérica, en base militar de Estados Unidos. Colombia posee 1,6 veces el territorio de Texas, segundo Estado de la Unión en extensión territorial, arrebatado a México, que después sirvió de base para conquistar a sangre y fuego más de la mitad de ese hermano país.

Por otro lado, han transcurrido ya 59 años desde que soldados colombianos fueron enviados a la distante Asia para combatir junto a las tropas yankis contra chinos y coreanos en octubre de 1950. Lo que el imperio pretende ahora es enviarlos a luchar contra sus hermanos venezolanos, ecuatorianos y otros pueblos bolivarianos y del ALBA, para aplastar la Revolución Venezolana, como trataron de hacer con la Revolución Cubana en abril de 1961.

Durante más de un año y medio, antes de la invasión, el gobierno yanki promovió, armó y utilizó las bandas contrarrevolucionarias del Escambray, como hoy utiliza a los paramilitares colombianos contra Venezuela.

Cuando el ataque de Girón, los B-26 yankis tripulados por mercenarios operaron desde Nicaragua, sus aviones de combate eran transportados hacia la zona de operaciones en un portaaviones, y los invasores de origen cubano que desembarcaron en aquel punto venían escoltados por buques de guerra y la infantería de marina de Estados Unidos. Hoy sus medios de guerra y sus tropas estarán en Colombia, no sólo como una amenaza para Venezuela sino para todos los Estados de Centro y Suramérica.

Es realmente cínico proclamar que el infame acuerdo es una necesidad de la lucha contra el tráfico de drogas y el terrorismo internacional. Cuba ha demostrado que no se necesitan tropas extranjeras para evitar el cultivo y el tráfico de drogas y mantener el orden interno, a pesar de que Estados Unidos, la potencia más poderosa de la tierra, promovió, financió y armó durante decenas de años las acciones terroristas contra la Revolución Cubana.

La paz interna es prerrogativa elemental de cada Estado; la presencia de tropas yankis en cualquier país de América Latina con ese propósito es una descarada intervención extranjera en sus asuntos internos, que inevitablemente provocará el rechazo de su población.

La lectura del documento demuestra que no sólo las bases aéreas colombianas se ponen en manos de los yankis, sino también los aeropuertos civiles y en definitiva cualquier instalación útil a sus fuerzas armadas. El espacio radioeléctrico queda también a disposición de ese país portador de otra cultura y otros intereses que nada tienen que ver con los de la población colombiana.

Las Fuerzas Armadas norteamericanas disfrutarán de prerrogativas excepcionales.

En cualquier parte de Colombia los ocupantes pueden cometer delitos contra las familias, los bienes y las leyes colombianas, sin tener que responder ante las autoridades del país; a no pocos lugares llevaron los escándalos y las enfermedades, como hicieron con la base militar de Palmerola, en Honduras. En Cuba, cuando visitaban la neocolonia, se sentaron a horcajadas sobre el cuello de la estatua de José Martí, en el Parque Central de la Capital. La limitación relacionada con el número total de soldados puede ser modificada por solicitud de Estados Unidos, sin restricción alguna. Los portaaviones y barcos de guerra que visiten las bases navales concedidas llevarán cuantos tripulantes requieran, y pueden ser miles en uno solo de sus grandes portaaviones.

El Acuerdo se extenderá por períodos sucesivos de 10 años, y nadie puede modificarlo sino al final de cada período, advirtiéndolo un año antes. ¿Qué hará Estados Unidos si un gobierno como el de Johnson, Nixon, Reagan, Bush padre o Bush hijo y otros similares, recibe la solicitud de abandonar Colombia? Los yankis fueron capaces de derrocar decenas de gobiernos en nuestro hemisferio. ¿Cuánto duraría un gobierno en Colombia si anunciara tales propósitos?

Los políticos de América Latina tienen ahora ante sí un delicado problema: el deber elemental de explicar sus puntos de vista sobre el documento de anexión. Comprendo que lo que ocurre en este instante decisivo de Honduras ocupe la atención de los medios de divulgación y los Ministros de Relaciones Exteriores de este hemisferio, pero el gravísimo y trascendente problema que tiene lugar en Colombia no puede pasar inadvertido por los gobiernos latinoamericanos.

No albergo la menor duda sobre la reacción de los pueblos; sentirán el puñal que se clava en lo más profundo de sus sentimientos, en especial el de Colombia: ¡se opondrán, jamás se resignarán a tal infamia!

El mundo enfrenta hoy graves y urgentes problemas. El cambio climático amenaza a toda la humanidad. Líderes de Europa casi imploran de rodillas algún acuerdo en Copenhague que evite la catástrofe. Presentan como realidad que en la Cumbre no se alcanzará el objetivo de un convenio que reduzca drásticamente la emisión de gases de efecto invernadero. Prometen proseguir la lucha por alcanzarlo antes de 2012; existe riesgo real de que no pueda lograrse antes de que sea demasiado tarde.

Los países del Tercer Mundo reclaman con razón a los más desarrollados y ricos cientos de miles de millones de dólares anuales para costear los gastos de la batalla climática.

¿Tiene algún sentido que el gobierno de Estados Unidos invierta tiempo y dinero en construir bases militares en Colombia para imponer a nuestros pueblos su odiosa tiranía? Por ese camino, si un desastre amenaza al mundo, un desastre mayor y más rápido amenaza al imperio, y todo sería consecuencia del mismo sistema de explotación y saqueo del planeta.

Fuente: http://www.cubadebate.cu/reflexiones-fidel/2009/11/06/la-anexion-de-colombia-a-estados-unidos/




La ambigüedad de EEUU quedó en evidencia
Micheletti "aplaza" su Gobierno de unidad tras repudio internacional a la dictadura y respaldo a Zelaya

VTV...07/11/2009


Presidente Zelaya rechazó de nuevo la propuesta del régimen golpista y dijo no tener "ningún deseo de volver a dialogar con quien no quiere dialogar y realmente manifiesta posiciones de intransigencia y deshonestidad".

El dictador de Honduras, Roberto Micheletti, decidió, este viernes, "aplazar" para la semana que viene la concreción de lo que ayer, jueves, anunció como un "Gobierno de unidad" pero sin la participación del depuesto presidente constitucional, Manuel Zelaya, tras el repudio unánime de la Comunidad Internacional a su decisión.

"Dando nuevamente espacio de reflexión al señor Zelaya, el presidente Micheletti ratificó el día de hoy su disponibilidad a reconocer que es importante un compás de espera durante este fin de semana para lograr concretar el Gobierno de unidad y reconciliación", indicó el régimen de facto en un comunicado.

Zelaya rechazó de nuevo, en declaraciones telefónicas a Efe, la propuesta del régimen golpista y dijo no tener "ningún deseo de volver a dialogar con quien no quiere dialogar, y realmente manifiesta posiciones de intransigencia y deshonestidad".

Desde la Embajada de Brasil, donde permanece desde el 21 de septiembre pasado, reiteró que sigue "siendo el presidente de Honduras".

"No voy a renunciar a ese mandato del pueblo hondureño, porque sería traicionar el principio básico de que la Presidencia sigue en vigencia antes y después de las elecciones (del 29 de noviembre) y hasta el 27 de enero", recalcó.

En cuanto a la conformación del Gobierno de unidad que se establece en el Acuerdo Tegucigalpa-San José, dijo que él, como "presidente legítimo" tampoco pretendía elegirlo, sino delegar esa responsabilidad a la Comisión de Verificación de dicho pacto.

El anuncio hecho por Micheletti de lo que denominó un "Gobierno de unidad y reconciliación" se produjo al filo de la medianoche del jueves, cuando se cumplía el plazo establecido en el Acuerdo Tegucigalpa-San José para la instalación de dicho Gabinete.

El acuerdo no establece, explícitamente, quién debe presidirlo, pero la mayoría de la Comunidad Internacional dio su respaldo al mandatario derrocado y criticó la decisión de Micheletti.

Repudio de la Comunidad Internacional:

El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, recalcó que "naturalmente" corresponde presidir el Gobierno de unidad y reconciliación "a quien detenta legítimamente el cargo de presidente de la nación hondureña", en referencia a Zelaya.

Insulza "deploró" la interrupción del proceso de implementación del Acuerdo Tegucigalpa-San José e instó a las partes a cumplir lo pactado "sin más subterfugios".

También la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) condenó la posición de Micheletti de "conformar unilateralmente" el Gobierno de unidad e indicó que "la restitución inmediata del presidente constitucional José Manuel Zelaya, en su legítimo cargo, es el elemento central" del pacto.

Por su parte, el subsecretario chileno de Relaciones Exteriores, Alberto Van Klaveren, reiteró que no reconoce al Gobierno de Micheletti e indicó que éste, al no contar con el reconocimiento de casi ningún país de la región es casi "imposible" que pueda seguir gobernando en Honduras.

Más ambiguo fue Estados Unidos, que a través del portavoz de su Departamento de Estado, Ian Kelly, se manifestó "decepcionado con ambas partes" y las instó a retomar "inmediatamente" el diálogo para formar el Gobierno de unidad.

Para Washington, lo que pasó la noche del jueves "es que no hubo un acuerdo sobre el Gobierno de Unidad y Reconciliación Nacional".

"Fue un Gobierno decidido unilateralmente y un Gobierno que se decide unilateralmente no es uno de unidad", añadió.

Micheletti sigue burlándose:

El Gobierno de Micheletti aseguró hoy que fue Zelaya quien incumplió el Acuerdo Tegucigalpa-San José al no presentar propuestas para un Gobierno de unidad y pidió a la Comisión de Verificación que así lo establezca.

"Tendrá que expresar que hasta las doce de la noche (de ayer) se esperó respuesta del señor Zelaya para integrar el Gobierno de unidad", afirmó el ministro de la Presidencia de facto, Rafael Pineda.

El movimiento popular hondureño que exige la restitución de Zelaya volvió a concentrarse hoy en Tegucigalpa, frente a la sede del Congreso, ente que debe decidir sobre la restitución del presidente depuesto, según el Acuerdo Tegucigalpa-San José.

El Frente de Resistencia contra el golpe de Estado calificó la decisión de Micheletti de conformar sin su rival un Gobierno de Unidad como "burla" y "segundo golpe de Estado".

Fuente: http://vtv.gob.ve/noticias-internacionales/25868

Documento oficial de la Fuerza Aérea de EEUU revela las verdaderas intenciones detrás del Acuerdo Militar con Colombia

Aporrea..07/11/2009


Un documento oficial del Departamento de la Fuerza Aérea del Departamento de Defensa de Estados Unidos revela que la base militar de Palanquero, Colombia “garantiza la oportunidad para conducir operaciones de espectro completo por toda América del Sur”. Esta afirmación contradice las explicaciones dadas por el presidente Álvaro Uribe y el Departamento de Estado de EEUU sobre el acuerdo militar firmada el pasado 30 de octubre entre Washington y Colombia. Los gobiernos de Colombia y EEUU han mantenido públicamente que el acuerdo militar se trata solamente de operaciones y actividades dentro del territorio colombiano para combatir el narcotráfico y el terrorismo interno. El presidente Uribe ha reiterado múltiples veces – incluso en la reunión de la UNASUR en Bariloche, Argentina – que su acuerdo militar con Washington no afectará a sus vecinos. No obstante, el documento de la Fuerza Aérea de EEUU confirma lo contrario e indica que las verdaderas intenciones y objetivas detrás del acuerdo son para poder realizar operaciones militares a nivel región para combatir la “amenaza constante…de los gobiernos anti-estadounidenses”.

El acuerdo militar entre Washington y Colombia autoriza el acceso y uso de siete instalaciones militares en Palanquero, Malambo, Tolemaida, Larandia, Apíay, Cartagena y Málaga. Adicionalmente, el acuerdo permite “el acceso y uso de las demás instalaciones y ubicaciones” por todo el territorio colombiano, sin restricciones. Junto con la imunidad plena que este acuerdo otorga a los militares, civiles y contratistas estadounidenses que entrarán a territorio colombiano en el marco del convenio, la autorización para que EEUU utilice cualquier instalación en el país, incluyendo a los aeropuertos comerciales, significa una entrega total de la soberanía colombiana.

El documento de la Fuerza Aérea destaca la importancia de la base militar de Palanquero y habla sobre la necesidad de invertir 46 millones de dólares para acondicionar la pista aérea, las rampas y varias otras instalaciones de la base para convertirla en una Localidad de Cooperación en Seguridad (CSL) de EEUU. “Estableciendo una Localidad de Coperación en Seguridad (CSL) en Palanquero apoyará la Estrategia de Postura del Teatro del Comando Combatiente (COCOM) y demostrará nuestro compromiso con la relación con Colombia. El desarrollo de este CSL nos da una oportunidad única para las operaciones de espectro completo en una sub-región crítica en nuestro hemisferio, donde la seguridad y establidad están bajo amenaza constante de las insurgencias terroristas financiadas por el narcotráfico, los gobiernos anti-estadounidenses, la pobreza endémica y los frecuentes desastres naturales…”

No es dificil imaginar cuales gobiernos en Suramérica son considerados por Washington como “anti-estadounidenses”. Sus constantes declaraciones agresivas contra Venezuela y Bolivia, e incluso Ecuador, comprueban que son los países del ALBA que son percibidos por Washington como una “amenaza constante”. De clasificar un país “anti-estadounidense” es considerarlo un enemigo de Estados Unidos. Bajo este contexto, es lógico pensar que EEUU reaccionaría frente a una región llena de “enemigos” con una agresión militar.

La lucha contra el narcotráfico es secundaria

Según el documento, “El acceso a Colombia profundizará la relación estratégica con los Estados Unidos. La fuerte relación de cooperación en seguridad también ofrece una oportunidad para conducir operaciones de espectro completo por toda Suramérica, incluyendo el apoyo para las capacidades de combatir el narcotráfico.” Aquí es evidente que la lucha contra el narcotráfico es un asunto secundario. Este hecho contradice las explicaciones dados por los gobiernos de Colombia y Washington que han intentado aparentar que el objetivo principal del acuerdo militar es para combatir el narcotráfico. El documento de la Fuerza Aérea prioritiza a las operaciones militares continentales necesarias para combatir “amenazas constantes”, como los gobiernos “anti-estadounidenses” en la región.

Palanquero es la mejor opción para el alcance continental

El documento de la Fuerza Aérea explica que “Palanquero es sin duda el mejor lugar para invertir en el desarrollo de la infrastructura dentro de Colombia. Su ubicación central está dentro del alcance de los áreas de operaciones…en la región…y su ubicación aislada ayudará…minimizar el perfil de la presencia militar estadounidense. La intención es utilizar la infrastructura existente...mejorar la capacidad de EEUU para responder rápidamente a una crisis y asegurar el acceso regional y la presencia estadounidense…Palanquero ayuda con la misión de movilidad porque garantiza el acceso a todo el continente de Suramérica con la excepción de Cabo de Hornos…”

Espionaje y guerra

Adicionalmente, el documento de la Fuerza Aérea confirma que la presencia militar estadounidense en Palanquero, Colombia aumentará las capacidades de espionaje e inteligenica, y permitirá a las fuerzas armadas estadounidenses aumentar sus capacidades para ejecutar una guerra en Suramérica. “El desarrollo de [la base en Palanquero] profundizará la relación estratégica entre EEUU y Colombia y está en el interés de las dos naciones…[La] presencia también incrementará nuestra capacidad para conducir operaciones de Inteligencia, Espionaje y Reconocimiento (ISR), mejorará el alcance global, apoyará los requisitos de logística, mejorará las relaciones con socios, mejorará la cooperación de teatros de seguridad y aumentará nuestras capacidades de realizar una guerra expedita.”

El lenguaje de guerra de este documento evidencia las verdaderas intenciones detrás del acuerdo militar entre Washington y Colombia: están preparándose para una guerra en América Latina. Los últimos días han estado llenos de conflictos y tensiones entre Colombia y Venezuela. Hace días, el gobierno venezolano capturó tres espías del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) de Colombia – su agencia de inteligencia y espionaje – y descubrió varias operaciones activas dirigidas a la desestabilización y el espionaje contra Cuba, Ecuador y Venezuela. Las operaciones Fénix, Salomón y Falcón, respectivamente, fueron reveladas por documentos que encontraron junto a los funcionarios capturados del DAS. Hace dos semanas, también fueron hallados 10 cadáveres en el estado Táchira por la frontera con Colombia. Luego de realizar las investigaciones pertinentes, el gobierno venezolano descubrió que los cuerpos pertenecían a un grupo de paramilitares colombianos que se habían infiltrado a territorio venezolano. Esta peligrosa infiltración paramilitar desde Colombia forma parte de un plan de desestabilización contra Venezuela que busca crear un para-estado dentro del territorio venezolano y asi debilitar al gobierno del Presidente Chávez.

El acuerdo militar entre Washington y Colombia sólo aumentará esta tensión y violencia regional. Ahora con la información revelada en el documento de la Fuerza Aérea de Estados Unidos se hace evidente – sin duda ninguna – que Washington esta buscando promover una guerra en Suramérica, utilizando a Colombia como su base de operaciones. Frente a esta declaración de guerra, los pueblos de América Latina tienen que mostrar unidad y fuerza. La integración latinoamericana es la mejor defensa contra la agresión imperial.

*El documento del Departamento de la Fuerza Aérea de Estados Unidos fue redactado en mayo 2009 como parte de la justificación del presupuesto para el 2010 enviado por el Pentágono al Congreso estadounidense. Es un documento oficial de la Fuerza Aérea y reafirma la veracidad del Libro Blanco: La Estratégia de Movilidad Global del Comando Aéreo de la Fuerza Aérea de EEUU que fue denunciado por el Presidente Chávez durante la reunión de la UNASUR en Bariloche el 28 de agosto pasado. He puesto el documento y la traducción no-oficial de los segmentos sobre la base de Palanquero en la página web del Centro de Alerta para la Defensa de los pueblos, un espacio que estamos construyendo para asegurar que las denuncias e información estratégica esten disponibles para que los pueblos puedan defenderse con contundencia frente a la constante agresión imperial.

Documento original en inglés: http://www.centrodealerta.org/documentos_desclasificados/original_in_english_air_for.pdf


viernes, 6 de noviembre de 2009



El crucifijo y el poder de la Iglesia en Italia
Cruz y raya

Il Manifesto...06/11/2009




Gran escándalo ha causado el fallo del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo que, al admitir la denuncia de una ciudadana italiana, declara que la presencia de crucifijos en las aulas atenta contra la libertad de los padres para educar a sus hijos con arreglo a sus convicciones, y contra la libertad de religión de los alumnos. Escandaliza enormemente a los católicos apostólicos romanos. Pero no a los cristianos. Porque también hay cristianos que no son apostólicos romanos y no consideran que el símbolo de la cruz sea su valor esencial. Por supuesto, dista de ser ofensivo para quienes son ateos y no tienen religión, como yo, ni tampoco me parece ofensivo para quienes profesan otra religión.

El elemento extraordinario de la sentencia, destinada a provocar no sólo escándalo sino también debate y enfrentamiento, es el hecho de que irrumpe en la pantalla plana de la realidad italiana que vive ―¿vivirá?― durante milenios a la sombra del poder de la Iglesia romana. Desde este punto de vista es la crítica profunda a su símbolo por excelencia, la cruz. Propuesto hasta ahora como una simbología impuesta, colgada en todos los colegios, los hospitales y las oficinas como la seña de identidad de nuestra cultura. Una omnívora cultura de estado. Y los católicos no renunciarán fácilmente a la idea de que son los gestores de la religión de estado.

No en vano, sin embargo, el tribunal europeo ha añadido que los alumnos de todas las edades pueden interpretar fácilmente la presencia de los crucifijos en las aulas como un evidente símbolo religioso, que por lo tanto podría condicionarles: aunque es un estímulo para los niños ya católicos, puede ser un condicionamiento y un trastorno para los de otras religiones y los ateos.

Estalla la ira del Vaticano, el gobierno de centroderecha acusa, desde la oposición democrática balbucean: «Es una cuestión de cultura, de tradición». Muy bien, abramos entonces el libro negro de esta cultura y esta tradición. El catolicismo de la Iglesia romana esconde tras el crucifijo, interpretado como redención, una cultura y una historia de violencias, atropellos y guerras. En nombre de la cruz se han cometido grandes fechorías, cruzadas, inquisiciones, el saqueo y las matanzas del Nuevo Mundo, la bendición de los imperios y de los hombres de la providencia. No olvidemos que hasta el siglo XIX el catolicismo prohibió traducir a la lengua vulgar la Biblia y el Evangelio.

En nombre de ese «signo» se han cometido los crímenes más atroces. Y se cometen, con las prohibiciones contra el derecho de los hombres a administrar el conocimiento y la libertad individual y sexual. Si es «nuestra cultura», como declaran la intrépida ministra Gelmini y el «pontífice» Buttiglione, que tacha la sentencia de Estrasburgo de «aberrante», ¿por qué no hablamos del lado oscuro de la cruz como simbología de poder? Pero es como si siguiéramos diciendo: el espacio de lo visible, de la iconografía cotidiana de la realidad, es mío, lo manejo yo y pongo en él los emblemas que yo quiero. Ahí está el error.

Grita la Conferencia Episcopal que la sentencia es «ideológica». Que nos hable de la violencia en la cultura histórica de la Iglesia romana apostólica, de las hogueras contra la razón herética que por sí sola hizo avanzar a la humanidad. Si lo que se quiere defender es su origen salvador para todos, entonces hay que aceptarlo y adaptarlo al presente, porque al principio no era más que un signo para identificar los lugares clandestinos de oración y culto. No un símbolo impuesto, que podría remitir a un ritual de muerte, contra los demás, contra las otras culturas, historias y religiones.

Ojalá la realidad que nos rodea, y en primer lugar la realidad formativa de la escuela, vuelva a ser un espacio creativo más allá de las religiones, sin imponer a nadie las obligaciones opresivas de los valores ajenos.

Fuente: http://temi.repubblica.it/micromega-online/dario-fo-croce-via/




El propio golpista dirigirá el nuevo ejecutivo
El "Gobierno" de Roberto Micheletti "dimite" en pleno para presidir el "Gobierno de Unidad" en Honduras

VTV...06/11/2009


Minutos después de que se conociera la renuncia, un "ex ministro" del régimen anunció que quien presidiría el nuevo Ejecutivo sería Roberto Micheletti. Dijo que la restitución del presidente constitucional Manuel Zelaya "la decidiría el congreso". Indígenas hondureños denuncian que golpistas no entregarán el poder

Tegucigalpa. Los integrantes del régimen de facto de Honduras, encabezado por Roberto Micheletti, "renunciaron" este jueves en pleno a petición de éste, a fin de "apoyar" la creación de un Gobierno de Unidad Nacional, según informó a última hora la agencia EFE.

Al parecer, y de acuerdo a la denuncia de la Resistencia en Honduras, la "renuncia" del "gabinete Micheletti" forma parte de una estrategia para burlar el mandato de la Comunidad Internacional de restituir al presidente Constitucional Manuel Zelaya, al señalarse que el pretendido "Gobierno de Unidad hondureño" podría instalarse en los próximos días sin que se decida sobre la restitución del mandatario legítimo.

De acuerdo al reporte de la enviada especial de teleSUR al país centroamericano, Adriana Sívori "trascendió que en los próximos días se formará el Gobierno de Reconciliación".

Agregó la reportera que hay versiones extraoficiales que indican la posibilidad de que esta misma noche (jueves) pueda reunirse el Congreso Nacional, que es el organismos al que se encomendó la responsabilidad de discutir la restitución del mandatario legítimo, Manuel Zelaya.

Micheletti "presidirá" Gobierno de Unidad en Honduras:

Minutos después de que se conociera la renuncia en pleno del Gabinete golpista hondureño, Rafael Pineda Ponce, ex ministro de la Presidencia del gobierno de facto de Honduras, aseguró en rueda de prensa que quien presidirá el Gobierno de Unidad Nacional es el actual mandatario ilegítimo, Roberto Micheletti.

"Siendo que don Roberto Micheletti es el presidente constitucional de la República (...) le correspondería liderar ese gabinete a don Roberto Micheletti", explicó Pineda Ponce.

Al preguntarle la prensa por qué el presidente constitucional, Manuel Zelaya, no integra el nuevo gobierno, Ponce respondió que en ninguna parte del acuerdo dice que el presidente Zelaya debe integrar inmediatamente el nuevo Ejecutivo, sino que es el Congreso el que decidirá si el gobernante regresa a su puesto.

Líderes indígenas advierten de que golpistas no tienen intenciones de entregar el poder

El Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh) advirtió de que la comisión negociadora del régimen golpista instalado desde el 28 de junio pasado jamás ha mostrado voluntad de restituir al presidente constitucional, Manuel Zelaya, y lo que busca es ganar tiempo para saquear los bienes del Estado.

A través de un comunicado, afirmaron que "el único propósito de éstos (los delegados de Roberto Micheletti) es ganar tiempo y consolidar los objetivos del golpe de Estado (...) saquear el erario nacional, impulsar los proyectos neoliberales de privatización de los recursos naturales y de las instituciones del Estado", puntualizan.

Fuente: http://vtv.gob.ve/noticias-internacionales/25833





Con Obama, arremetida contra América Latina

La Jornada...06/11/2009


A un año de la elección de Barack Obama, el saldo de la política de Estados Unidos hacia América Latina es muy desfavorable para sus pueblos y lejana de las expectativas de un trato más amistoso generadas durante su campaña electoral. Hagamos un somero recuento de los tres asuntos fundamentales que en este año muestran a las claras un rumbo imperial de arremetida contra América Latina.

A dos meses de la llamada Cumbre de las Américas, donde Obama anunció una nueva etapa en la relación con los vecinos del sur, se produjo el golpe de Estado en Honduras, dirigido –como afirmó Hugo Chávez– al eslabón más débil de la Alba. Tal vez otro de los objetivos de las fuerzas de ultraderecha del establishment involucradas fuera desacreditar las expectativas sobre las presumibles buenas intenciones de Obama hacia Latinoamérica, pero si el cuartelazo, como ha trascendido, salió de la base de Soto Cano, con la aprobación del Comando Sur, de funcionarios del Departamento de Estado y con la complicidad del mismísimo embajador estadunidense Hugo Llorens, ¿no es Barack Obama en su condición de cabeza del Ejecutivo el comandante en jefe de las fuerzas armadas y el superior de la señora Clinton? Lo cierto es que han pasado más de cuatro meses desde el golpe y las acciones del gobierno de Obama han sido débiles, tardías y contraproducentes al objetivo proclamado de restituir al presidente Zelaya. Con la mediación de su vasallo Óscar Arias, Washington dio respiración artificial a los golpistas justo en el momento en que quedaron totalmente aislados y repudiados por la ONU, la Unión Europea y hasta por la OEA. Más tarde, en el momento en que el ingreso clandestino de Zelaya al país unido al empuje de la resistencia popular ahondó la crisis política de la dictadura, el Departamento de Estado y la Casa Blanca prosiguieron alimentado un marco negociador que enfatiza en reconocer a la dictadura como actor principal de una solución política, como se ha demostrado en los últimos días. Sus acciones, en suma, han ido encaminadas a socavar la legitimidad del presidente Zelaya y a que, en el mejor de los casos, se le restituya sólo con carácter protocolar y sin tiempo para influir en el resultado de las elecciones del 29 de noviembre, las mismas que Estados Unidos y la OEA pretenden convalidar no importa el clima de represión masiva y ausencia de las más elementales garantías democráticas que las ha precedido. Todo sin tocar un pelo a los golpistas, ni desmantelar la estructura institucional en que se originó el golpe, ni sancionar a los autores de la feroz represión desatada. Todo, en fin, a espaldas del pueblo.

Por otro lado, tenemos las siete bases militares de Estados Unidos en Colombia y con ellas la cesión adicional a la fuerza aérea de la potencia del norte de siete aeropuertos civiles del país para que también los utilice a su antojo. Como bien dice el documento del Pentágono cuyo facsímil publica la revista colombiana Semana en su última edición, se trata de una oportunidad única para realizar operaciones contra gobiernos antiestadunidenses. Léase Venezuela, Ecuador, Bolivia, Paraguay, Nicaragua, El Salvador, Guatemala; no se diga Cuba y, ¿por qué no?, también podrían ser Brasil y Argentina. En fin de cuentas lo que decida Washington según su conveniencia. Es muy certero afirmar que Colombia se ha convertido en una gran base militar yanqui y dada su privilegiada posición geográfica se transforma por eso en una amenaza sin precedente para la libertad y la independencia latinoamericanas que exigirá una gran batalla popular por sacar esas bases.

El otro asunto que pone en solfa toda la retórica obamiana de una nueva etapa en el trato con América Latina es el bloqueo a Cuba, que continúa intacto, infamia que el gobierno de Estados Unidos intenta justificar, como se vio en boca de su representante en la ONU Susan Rice después de la condena a la medida genocida por 187 de los 192 estados miembros del organismo. Es penoso el espectáculo de una inteligente mujer afroestadunidense de antecedentes progresistas trasformada en una arrogante vocera del cruel castigo al pueblo cubano, pero en el fondo, como en el caso de Obama, ocurre que quieran o no, al llegar a la Casa Blanca o claudican de sus anteriores ideales o tienen que irse, como ha ocurrido ya con varios de los colaboradores del afroestadunidense.

Fuente: http://www.jornada.unam.mx/2009/11/05/index.php?section=opinion&article=023a1mun

jueves, 5 de noviembre de 2009




Shannon da otro golpe a Honduras.

TeleSUR...05/11/2009

Es posible que el subcretario de Estado, Thomas Shannon, no haya podido torcerle el brazo a nadie en Honduras, pero es probable que a la administración Obama se lo estén torciendo los lobbystas del gobierno golpista (que son pagados con dinero saqueado al pueblo hondureño) y los republicanos de Miami. Al deducir por las recientes declaraciones de Thomas Shannon a la cadena CNN, en cuanto a que las elecciones se darán y reconocerán aún sin la restitución del presidente constitucional Manuel Zelaya.


''No todo se puede cambiar haciéndole frente, pero no se puede cambiar nada hasta que uno no lo enfrenta''– James Baldwin, escritor afroamericano.

Es posible que el subcretario de Estado, Thomas Shannon, no haya podido torcerle el brazo a nadie en Honduras, pero es probable que a la administración Obama se lo estén torciendo los lobbystas del gobierno golpista (que son pagados con dinero saqueado al pueblo hondureño) y los republicanos de Miami. Al deducir por las recientes declaraciones de Thomas Shannon a la cadena CNN, en cuanto a que las elecciones se darán y reconocerán aún sin la restitución del presidente constitucional Manuel Zelaya.

No debemos de creer que Shannon, ni Hillary, ni Obama sean expertos en Honduras (existen países y negocios más importantes), que estén al tanto de lo que realmente ha acontecido con el golpe de Estado-Militar y las atrocidades a los derechos humanos. Ni que sepan que el pueblo hondureño ha salido masivamente a las calles y que sólo ha sido obligado a encarcelarse en sus casas después de muchos muertos, de cerrarles los medios que informaban la verdad, de darles palizas a punta de toletes y gases lacrimógenos. En síntesis: de aterrorizar el país.

Shannon debe de tener claro algunas cosas, como que los hondureños y hondureñas, no necesariamente seguidores del presidente Zelaya, estamos en contra del golpe de Estado-Militar en Honduras, y estamos conscientes de que la única forma de revertir ese golpe es restituyendo al presidente constitucionalmente elegido por el pueblo hondureño. Cualquier otra opción, incluyendo las elecciones, sin ese primer paso, es avalar el golpe de Estado-Militar que ha enlutado a Honduras.

Shannon ni la administración Obama deben subestimar al pueblo hondureño, es cierto que es un pueblo pobre pero no tonto, puede que no tenga la posibilidad educativa formal de otros países pero cuenta con inteligencia natural, quizá haya estado sometido por su excesiva nobleza, una nobleza casi suicida. Pero las vanas esperanzas que le han dado los políticos a través de la historia y el empujoncito a ver la realidad que ha dado el presidente Zelaya, han llevado al pueblo hondureño a soñar con forjarse un futuro mejor.

Es ni más ni menos como cuando los esclavos en los Estados Unidos, no es que los negros eran felices siendo esclavos sino que carecían del conocimiento de sus derechos, pero con el apoyo de blancos humanistas lograron despertar y hacer su historia: en arte, en deportes, en política, etc., han sobresalido y demostraron ser tan iguales como los esclavistas, a tal grado que hoy un afroamericano es el presidente de los Estados Unidos.

El presidente Barack Obama ha hecho alarde de ser un hombre del pueblo, incluso, para demostrar lo cierto de su decir, evitó recibir grandes sumas de dinero –una manera de no comprometer su administración –para que apoyaran su campaña y mejor lo hizo vía internet . Con lo cual no sólo demostró cuán popular era entre los estadounidenses sino que logró récord en la colecta de fondos para una campaña electoral en los Estados Unidos. Partiendo de allí, Obama tiene una responsabilidad moral de escuchar a los pueblos, incluyendo el pueblo hondureño, y no creer a pie juntillas en los lobbystas, que su trabajo es ese: tratar de convencer hasta de lo imposible con tal de que se les pague bien.

¿Entonces, Barack, y los principios humanos de los que tanto habló durante toda su campaña y ahora como presidente, dónde quedan? Sí, ¿dónde quedan?, porque respaldar un golpe de Estado-Militar, de la forma que sea, avalando elecciones fraudolentas, por ejemplo, sin lugar a dudas, lo convierte también en golpista. Y las desafortunadas declaraciones de Shannon llevan a pensar que en la Casa Blanca solamente se ha cambiado de partido político y de color de piel de sus inquilinos, pero la esencia del desdén o desprecio por el llamado patrio trasero, continúa inamovible.

A raíz de las declaraciones de Shannon, he recibido cantidad de correos electrónicos y llamadas telefónicas del pueblo hondureño, expresando la decepción que les ha causado lo vertido por el Subcretario, pues debe tenerse firmeza en no reconocer elecciones que son un aborto de un golpe de Estado-Militar. Para calmar los ánimos de mis compatriotas, les expliqué que en el lenguaje diplomático algunas veces se oye una cosa pero se está diciendo otra: quizá Shannon, al decir que de cualquier manera se reconocerán las elecciones, está abriendo de par en par las puertas de los Estados Unidos, para que todas y todos los hondureños que lo deseen, se dirijan a la frontera del Norte a cruzar ríos o saltar muros, eso de la ilegalidad no será problema, ya se ha anunciado reformas para la inmigración, favoreciendo a los inmigrantes, el año que viene. Así es, porque entre más desestabilidad y miseria haya en estos pueblos, se acrecientan más las esperanzas de concretar sus sueños en los Estados Unidos.

Contrario a la lucha del presidente Zelaya, mejorar el nivel de vida de los hondureños/as para evitar en la medida de lo posible esa inmigración ilegal que muchas veces se convierte en tragedia.

Barack Obama conoce bien una historia, y no sólo la conoce sino que tuvo como invitada especial a su protagonista, Rosa Parks. Esta mujer afroamericana el 1º de diciembre de 1955, en Montgomery, Alabama, rehusó quitarse de un asiento designado para blancos y la arrestaron. Su audacia impulsó el movimiento en defensa de los derechos civiles. En cuestión de días, los negros de Montgomery organizaron un boicot casi total de los autobuses que en un año culminó con el fin de la segregación en los autobuses en Montgomery y un mayor nivel de organización popular.

Es más o menos así como está el pueblo hondureño: cansado de ir en la parte trasera del bus, aun cuando haya llegado primero a la estación. ¿Estará de acuerdo Obama de que el pueblo hondureño, verdadero propietario del autobús, sea segregado por unos pocos a ir eternamente en la parte trasera?.


* Roberto Quesada es escritor y diplomático hondureño en resistencia.

http://www.hondurasusaresistencia.com/

Fuente
: http://www.telesurtv.net/noticias/opinion/1444/shannon-da-otro-golpe-a-honduras/


La Colombia escalofriante

Rebelión...05/11/2009


No soy muy amigo de la estadística. Esta disciplina, entendida como la ciencia de la "recolección, análisis e interpretación de datos", ha sido objeto desde siempre de la manipulación por parte de quienes la conducen o quienes la contratan. Además, con frecuencia sufre de un abusivo manoseo poniéndosela por delante en cualquier situación. Y sirve para todo. Para "convencer" a la opinión pública o para destruir los argumentos del contrario. También para presupuestar, proyectar, programar, tomar decisiones en sectores públicos y privados, buscar aproximaciones a la verdad o redondear un cuadro dentro de alguna visión histórica o, en fin, para hacerse elegir Presidente de un país y, después a su amparo, seguir ahí por "sécula seculorum" mientras ellas se mantengan dóciles y leales y bien financiaditas. Además, todavía no logra convencerme aquello de que ya nada se valora, se arquea, se tasa, se regula, se niega o aprueba, si no va por delante un vibrante "tanto por ciento". Sin embargo, es inevitable reconocerlo, y lo hago con gusto: cuánto no han aportado las estadísticas al entendimiento y la comprensión de los problemas sociales y a las respuestas que estos requieren. No vista como herramienta para "hacer política" sino como instrumento para ejercer el servicio público desde el poder político, puede llegar a convertirse en un instrumento ideal.

Pero el introito que no engañe. No es ésta una columna de moral o espíritu acomodaticios. Muy al contrario, escuetamente, de la mano de las estadísticas que tanto han servido al temerario estilo "fujimorezco" del presidente Uribe, "creador, señor y patrón" de la Seguridad Democrática en Colombia, mi propósito es uno solo e inequívoco: mostrar, sin la recurrente retórica acostumbrada en la publicación de las estadísticas, lo que algunas de éstas vienen diciendo hoy por hoy sobre el discurrir de nuestra maltrecha república. Ojalá, así como usan a su antojo las estadísticas que los tienen en el poder, también algún día crean en ellas y las usen para sacar al país del más cruel, sanguinario y prolongado atolladero en que se ha visto inmerso en toda su historia.

Las fuentes todas son oficiales o de ONG respetables, también de autoridades colombianas o de organismos internacionales como la OEA y la ONU.

Veamos:

Según la Comisión Colombiana de Juristas, las ejecuciones extrajudiciales entre julio de 2002 y julio de 2008 alcanzaron la cifra de 1.205 casos. En los cuatro primeros meses del presente año, dice el propio Mindefensa, se dieron 5.270 homicidios, entre ellos los de 42 indígenas y 11 sindicalistas. Entre mayo de 2008 y abril de 2009, se produjeron 16 mil víctimas y cada 48 horas al menos un secuestro

Para el Índice Global de Paz 2008 (IGP), Colombia es el país más violento de América Latina y el décimo en el escalafón mundial. El 60% de nuestra población vive en la pobreza y 11 millones de compatriotas, en la absoluta miseria. Cada día mueren 14 niños por desnutrición y entre 177 países, figuramos como uno del los 8 con peores índices de iniquidad.

Y ahora recurro a dos voces que, aunque provenientes del establishment, alcanzan cierto grado de sensatez cuando verifican con honradez ellas mismas el estado de descomposición social del país que los vio nacer. Se trata de doña Lucy Nieto De Samper, columnista del diario El Tiempo de Bogotá, y la del doctor Ricardo Arias Mora, senador quindiano. Entre ambos nos muestran el siguiente cuadro:

"El desempleo es del 13,1 % y, a la vez que aumenta el empleo informal, decrece el empleo estable. El 36% de la población carece de servicios básicos. En vivienda de interés social, el déficit es de 2'300.000 unidades; no tiene vivienda digna 2'500.000 personas; 75.000 familias viven hacinadas; en 600.000 hogares no hay servicios públicos; 2'400.000 adultos se acuestan con hambre; 3'300.000 colombianos emigraron en busca de oportunidades… En la Colombia del siglo XXI, el 15 % es analfabeto. Al día hay 1.000 abortos, 45 violaciones infantiles, 3 niños asesinados y 35.000 niños explotados sexualmente. Y son menores de 16 años los autores del 75 por ciento de los 84 asesinatos registrados a diario…"

Somos, pues, mientras gracias a la Seguridad Democrática los que podemos hacerlo paseamos libres de sobresaltos por nuestras "modernas" carreteras, el país con el mayor número de desplazados en el mundo, entre 3 y 4,6 millones, muy por encima de Irak, Somalia y el Congo. A Venezuela, desde el 2002 han llegado más de 200.000 refugiados buscando la protección que nuestro Gobierno no les brindó. Y así al Ecuador, Panamá, España, EE.UU., etc.

Y es que, con todo y la artimaña de la "Seguridad Democrática" y las aceitadas estadísticas, la pregunta nos revienta en la cara:

¿Acaso a ese aletargado 70% que se dice viene votando y sosteniendo a Uribe desde el 2002 no le dice nada las anteriores escalofriantes cifras que están llevando a Colombia poco a poco pero con paso firme a su absoluta insolvencia ética y moral y a su inviabilidad como país civilizado?

Pobre país, pues, esta azotada Colombia, que sigue votando y reeligiendo su propia desgracia.




La guerra sucia de Israel contra Venezuela

Rebelión...05/11/2009


La injerencia sionista en los asuntos internos de la República Bolivariana de Venezuela, con el propósito de desinformar a nivel internacional su papel aglutinador y progresista en América Latina, fomentar a la contrarrevolución interna y crear un ambiente de tensión en el Cono Sur, se ha convertido en un vasto tinglado de actividades diplomáticas, operaciones encubiertas, burdo espionaje y empleo de diversos cómplices para cumplir sus propósitos oscuros.

Israel no actúa solo. Recibe, indiscutiblemente, el apoyo de su socio norteamericano, quien le ha permitido suplir muchas de sus funciones de intromisión en el Hemisferio Occidental mientras éste desata una incruenta guerra contra Irak y Afganistán, tensa las relaciones con Irán y Siria, crea un ambiente bélico en todo el Oriente Medio y mantiene a duras penas sus apetitos geopolíticos en el mundo entero. Ha sido, sin lugar a dudas, un acuerdo bien pensado entre ambos y cuyo engranaje ha comenzado a funcionar durante la última década.

La ofensiva diplomática sionista en América Latina

Con las recientes declaraciones de Dani Ayalón, Vicecanciller de Asuntos Exteriores, en el Centro Jerusalén de Asuntos Públicos, en que acusa al mandatario venezolano Hugo Chávez de convertir a Venezuela en una base de avanzada iraní en América Latina, parece definirse de manera más diáfana la actual campaña desatada por el régimen sionista contra esta nación progresista. Desde luego, la arremetida diplomática está acompañada por la labor de descarada subversión ejecutada por el Mossad dentro de ese país.

Un poco antes, el 24 de julio de 2009, la directora general de la cancillería israelí para América Latina, Dorit Shavit, se dedicó a correr a viva voz que el gobierno de Venezuela dotaba de documentación falsa a agentes iraníes para que ejecutaran acciones anti israelíes en la región y favorecieran al desarrollo de la lucha terrorista internacional, apoyando una de sus anteriores acusaciones en que había vinculado a Venezuela con el grupo libanés Hezbolá. En este caso concreto, señaló la diplomática sionista, que realizaba un periplo por Brasil. Perú y Colombia, acompañando a su canciller, lo siguiente: “Venezuela está ofreciendo documentos falsos a los iraníes para que viajen a Caracas y con esos documentos ver si pueden entrar a otros países“.

El propio Ministro de RR EE de Israel, Avigdor Lieberman, sostuvo entrevistas en Perú con el presidente Alán García y su Ministro de Defensa, Rafael Rey, el pasado 27 de julio, con vistas a coordinar sus estrategias contra sus vecinos países del ALBA entiéndase Bolivia, Ecuador y Venezuela, y tomar medidas contra el supuesto avance del terrorismo iraní en América Latina.

El embajador sionista para Costa Rica y Nicaragua, Ehud Eitam, se sumó también, de manera abierta y tendenciosa, a la campaña desinformativa promovida en la región por el gobierno sionista, al declarar sin ambages con respecto al periplo de Lieberman: “Nuestro temor no sólo es por la diplomacia iraní, sino su influencia terrorista. Creemos que con esta visita podemos aclarar la posición de la política iraní”.

El canciller Lieberman es partidario de repetir la aventura genocida de Hiroshima y Nagasaki contra el pueblo palestino, lo que ha despertado una abierta renuencia de jefes de estado de países como Francia, y Obama de entrevistarse con este depravado y sicópata sionista.

Venezuela en el punto de mira

Durante su visita a Colombia, Lieberman analizó con el gobierno de Uribe la manera de fortalecer la actividad del Mossad en los planes desestabilizadores contra la República Bolivariana de Venezuela, entre los que se encuentran el apoyo a diversos grupos de la oposición escuálida y la infiltración de paramilitares colombianos para infiltrarlos con fines de espionaje y subversión. No escapa a este andamiaje anti bolivariano el financiamiento por parte de células internas del Mossad a grupos de oposición dentro de las universidades del país, como la Universidad Católica Andrés Bello y la Simón Bolívar, así como la diseminación mediante una ofensiva mediática, de un falso antisemitismo por parte del gobierno, que tuvo como colofón el atentado contra la Sinagoga Judía en Caracas, realizado por los propios agentes del Mossad.

La campaña desinformativa de los agentes de Israel en Venezuela tuvo su expresión igualmente en el atentado contra el periodista Rafael Finol Meléndez y el posterior asesinato de otro periodista, Orel Zambrano, en enero pasado.

La principal protagonista de los planes desestabilizadores contra Venezuela es Global CST, la que bajo las órdenes de Israel Ziv, aglutina a varios militares sionistas de alto rango, quienes operan de manera directa con las FF AA de Colombia y el DAS. Lieberman prometió a Uribe un aumento en la ayuda militar en cuanto a equipamiento y material de guerra, así como en técnicas de inteligencia y subversión.

Otro participante y operativo del Mossad que actúa en Venezuela de forma descubierta es Sammy Eppel, quien funge como jefe de una supuesta Comisión de derechos Humanos dentro de la Fraternidad Hebrea en Caracas. Al referirse al reforzamientos de las relaciones entre Irán y Venezuela, declaró. “Para nosotros esa relación ha sido siempre preocupante y sigue siendo preocupante, porque no sabemos adónde se va llegar, sabemos los propósitos de Ahmadinejad, cuáles son sus ideas y nos preocupa el traspaso de estas ideas a Venezuela y Latinoamérica en general”.

Israel arma a su peón colombiano

Para nadie es un secreto que el Ministro de Defensa de Colombia, Juan Manuel Santos, se ha convertido en un dudoso y asiduo turista a Israel. En más de una oportunidad se han destapado sus sigilosos viajes a Tel Aviv con la intensión de adquirir novedosos armamentos, coordinar políticas y buscar ayuda de inteligencia para cumplir el rol desestabilizador de Colombia en el Cono Sur. Asimismo, para vencer las frágiles restricciones sobre la venta de armas a otras naciones existentes en Israel, Santos conspira con los jefes del CIBAT emporio exportador de armas de armas y de mercenarios sionistas, con quienes ha logrado suplir de medios de guerra no solo a las fuerzas armadas colombianas, sino ha bendecido el camino para la entrega de armas a los paramilitares colombianos, a cambio de que estos participen en agresiones desestabilizadoras contra Venezuela.

Israel, por hoy, exporta el 10,4 % del armamento que entra a los países de Latinoamérica, por detrás de Estados Unidos, siendo Colombia uno de sus principales compradores, tal como ha sido denunciado reiteradamente por diversos medios, entre ellos el avezado periodista José Steinsleger.

Un hecho no muy reciente puso al desnudo la complicidad del Mossad con los paramilitares colombianos, cuando en el 2002 se descubrió la venta de un cargamento de tres mil fusiles AK-47 y 5 millones de municiones para los mismos. La operación dirigida por el Mossad a través del Grupo Internacional de Representaciones (GIRSA), propiedad de sionistas radicados en Guatemala, contemplaba el desvío de este arsenal perteneciente al entonces gobierno del presidente nicaragüense Enrique Bolaños hacia las organizaciones paramilitares colombianas, con el acuerdo tácito de usarlo no solo para combatir a las fuerzas de izquierda dentro del país, sino también emplearlas en la guerra sucia contra Venezuela.

Las FF AA de Colombia es una de las más numerosas de América del Sur, contando con 253.000 efectivos, superando en soldados a sus vecinos. Igualmente cuenta con 134 carros de combate del tipo Hummer o parecidos, contando con la mayor cantidad de helicópteros artillados en el sub continente (140) y uno de los más significativos arsenales de artillería terrestre y anti aérea.

Israel ha sido, según José Steinsleger, el proveedor de aviones de nueva generación del tipo Kfir y de tanques Merkava al ejército colombiano, mientras otras fuentes señalan el fortalecimiento de la industria militar de Colombia con la ayuda sionista.

La INDUMIL de Colombia se ha especializado en la fabricación del fusil Galil ACE, con plena asesoría israelí, convirtiendo a los colombianos en el principal exportador de este tipo de arma en el mundo. La transferencia de tecnología sionista para INDUMIL no se ha limitado solo al desarrollo de la producción del Galil, sino abarca también lanzagranadas de 40 milímetros, el lanzador individual de granadas, lanzador múltiple de granadas, así como otros tipos de bombas.

Consideraciones finales

Israel pretende convertir a América Latina en una zona de tensiones, exacerbando los conflictos entre naciones y fomentando divisiones, sembrando el miedo entre ellas, subvirtiendo el orden institucional en los países del ALBA y cumpliendo a cabalidad el rol que le asignó Washington.

El ojo inquisidor y la denuncia oportuna son nuestras armas más legitimas para alertar sobre este peligro que se cierne sobre todas nuestras naciones y, particularmente, contra Venezuela.

miércoles, 4 de noviembre de 2009



Honduras
La victoria del “Smart Power”

Aporrea...04/11/2009


Henry Kissinger decía que la diplomacia es “el arte de refrenar el poder”. Obviamente, el ideólogo más influyente de la política exterior estadounidense del siglo XX estaba haciendo referencia a la necesidad de “refrenar el poder” de otros países y gobernantes para poder mantener la posición dominante de Estados Unidos ante el mundo. Presidentes como George W. Bush, empleaban el “poder duro” (Hard Power) para lograr este fin: armas, bombas, amenazas e invasiones militares. Otros como Bill Clinton, utilizaban el “poder suave” (Soft Power): la guerra cultural, Hollywood, ideales, diplomacia, autoridad moral y campañas para ganar “las mentes y corazones” de las poblaciones civiles en países adversarios. Pero la administración de Barack Obama ha optado por una mutación de estos dos conceptos, fusionando el poder militar con la diplomacia, la influencia política y económica con la cultural y legal, y llamándolo el “poder inteligente” (Smart Power). Su primera aplicación ha sido en el caso de Honduras, con el golpe de estado, y hasta hoy, ha funcionado a la perfección.

Decía la Secretaria de Estado Hillary Clinton en su audiencia de confirmación ante el Senado de Estados Unidos, que “debemos utilizar lo que se ha llamado el
“smart power”, el rango completo de herramientas que están a nuestra disposición –diplomáticas, económicas, militares, políticas, legales y culturales– escogiendo la herramienta correcta, o combinación de herramientas, para cada situación. Con el “smart power”, la diplomacia sería la vanguardia de nuestra política exterior.” Luego, Clinton reforzaba este concepto afirmando que “el camino más sabio es primero utilizar la persuasión.”

¿Qué es lo inteligente de ésta concepción? Es una política dificil de clasificar, dificil de detectar y dificil de desmontar. El caso de Honduras es ejemplar. Por un lado, el Presidente Obama condenaba al golpe contra el Presidente Zelaya, y por otro lado, su embajador en Tegucigalpa se reunía constantemente con los golpistas. La Secretaria de Estado Clinton repetía muchas veces durante los últimos cuatro meses, desde el primer día del golpe, que Washington no quería meterse ni influir sobre la situación en Honduras –que eran los hondureños que tenían que resolver su crisis, sin ninguna injerencia externa. No obstante, fue Washington que impuso la mediación de Oscar Arías, presidente de Costa Rica, era Washington que seguía financiando al régimen golpista a través de la USAID, y era Washington que comandaba y controlaba las fuerzas armadas hondureñas, a través de la base militar Soto Cano (Palmerola).

También fue el lobby de Washington que redactó el “acuerdo” de San José, y en el final, fueron los altos funcionarios de la Casa Blanca y el Departamento de Estado que tuvieron que “persuadir” a los hondureños para que aceptaran ese acuerdo. A pesar de la constante injerencia de Estados Unidos en el golpe de estado en Honduras – desde su financiación, diseño y apoyo político hasta el apoyo militar – el
“smart power” logró distorcionar la realidad ante la opinión pública, convertiendo al duo Obama/Clinton en los “grandes ganadores del multilateralismo”.

Lo que hizo el
“smart power” fue disfrazar el unilateralismo estadounidense de multilateralismo. Del primer día, la agenda de Washington se impuso. El 1 de julio, los voceros del Departamento de Estado admitieron en una rueda de prensa que tenían conocimiento previo del golpe. También admitieron que dos altos funcionarios de la diplomacia estadounidense, Thomas Shannon y James Steinberg, estuvieron en Honduras la semana anterior al golpe para mantener reuniones con los grupos civiles y militares que lo llevaron a cabo. Decían que su propósito era “frenar el golpe”, pero ¿cómo se explica entonces el hecho de que el avión llevando al presidente Zelaya ilegalmente fuera del país salió de la base militar de Soto Cano, en la presencia de los militares estadounidenses?

Los hechos demuestran la verdad sobre el papel de Washington en el golpe de estado, y su posterior experimento exitoso con la aplicación del
“smart power”. Sabían del golpe, financiaban a los involucrados, ayudaron sacar al Presidente Zelaya del país y luego, utilizaron a la Organización de Estados Americanos (OEA) –en un momento incluso en que estaba en peligro de extinción– como fachada para imponer su agenda. En su discurso, el Departamento de Estado siempre legitimaba a los golpistas, llamando a “todas las partes… a resolver las disputas políticas de manera pacífica a través del diálogo”. ¿Desde cuando un usurpador ilegal del poder es considerado “una parte” légitima dispuesta a dialogar? Obviamente es un actor criminal que no estaba dispuesto a dialogar en primer lugar. Basada en esa lógica de Washington, el mundo debería hacer un llamado al gobierno de Obama para que “resuelva su disputa política con Al Qaeda de manera pacífica a través del diálogo”.

El “smart power” de Obama/Clinton logró su primera victoria durante los primeros días del golpe cuando los estados miembros de la OEA aceptaron la solicitud de esperar 72 horas para “darles tiempo” en Honduras para resolver su crisis. Luego vino la imposición de la mediación de Arias, y ya, de haber cedido tanto espacio a Washington, el imperio tomó el reino y lo llevó hasta el final. Cuando el presidente Zelaya se fue a Washington para reunirse con la Secretaria de Estado Clinton, fue obvio quien estaba en control. Y así lo jugaron, alargando el tiempo hasta el último momento para no permitir un regreso de Zelaya que tuviera el espacio de revertir lo que ya se habían logrado.

El pueblo se quedó fuera, los meses de represión, violencia, persecución, violaciones, toques de queda, cierres de medios de comunicación y torturas y asesinatos, se han olvidado. Menos mal, como dijo el Subsecretario de Estado Thomas Shannon, luego de lograr hacer firmar el “acuerdo” entre Micheletti y Zelaya, que la situación en Honduras se pudo resolver “sin violencia”.

Al firmar el acuerdo el pasado 30 de octubre, Washington “levantó” las pocas restricciones que había impuesto para presionar al régimen golpista. Ya pueden sacar sus visas y viajar al norte, no se tienen que preocupar por los millones de la USAID que ni siquiera se habían suspendido. Los militares estadounidenses en Soto Cano pueden reiniciar todas sus actividades -bueno, realmente nunca las habían dejado de hacer, como confirmó el Comando Sur del Pentágono, días después del golpe: “todo está normal con nuestras fuerzas armadas en Honduras, están haciendo sus actividades y maniobras conjuntas con los hondureños como siempre”. Washington está preparando su delegación de observadores para las elecciones en Honduras el próximo 29 de noviembre –ya están en camino.

Olvídense del torturador Billy Joya y los paramilitares colombianos enviados para ayudar al régimen golpista a “controlar” a la población. No se preocupen por el arma sónica LRAD utilizado para torturar a los habitantes en la embajada de Brasil, durante la estadía de Zelaya. No pasó nada. Como dijo Thomas Shannon, “felicito a dos grandes hombres por haber logrado este acuerdo histórico”. Y la Secretaria de Estado Hillary Clinton comentó que “este acuerdo es un logro tremendo para los hondureños”. Disculpe, ¿para quién?

En el final el celebrado “acuerdo” impuesto por Washington sólo llama al congreso de Honduras –el mismo que falsificó la renuncia de Zelaya para justificar el golpe, y el mismo que apoyó la instalación ilegal de Micheletti en la presidencia– de determinar si quieren o no restituir a Zelaya en la presidencia. Y sólo después de recibir una opinión de la Corte Suprema de Honduras –la misma que opinó que Zelaya era un traidor por promover una encuesta no vinculante sobre una posible reforma constitucional y la misma que ordenó su captura violenta. En caso de ser positiva la respuesta del congreso, Zelaya no tendrá ningun poder. Su gabinete sería impuesto por los partidos que apoyaron el golpe, las fuerzas armadas golpistas estarían bajo el control de la Corte Suprema golpista, y además, Zelaya podría ser enjuiciado por su supuesto “crimen”, por haber promovido una encuesta no vinculante sobre una potencial reforma constitucional.

Según el “acuerdo”, una comisión de la verdad supervisará la implementación de los términos acordados. Hoy anunciaron que la comisión será liderada por una ficha de Washington, el ex presidente chileno, Ricardo Lagos. Promotor de las políticas neoliberales de Washington, Lagos es codirector de la Junta Directiva del Diálogo Interamericano, un centro de pensamiento estadounidense de la derecha que analiza los temas relacionados con América Latina. También fue encargado por la National Endowment for Democracy (NED) para crear una versión chilena, la Fundación Democracia y Desarrollo, para “promover la democracia”, al estilo estadounidense en la región. Al salir de la presidencia en Chile, Lagos fue Presidente del Club de Madrid –un club exclusivo de expresidentes dedicados a “promover la democracia” por el mundo. En ese “club”, también figuran personajes vinculados con la desestabilización de los gobiernos de izquierda en América Latina como Jorge Quiroga y Gonzalo Sánchez de Lozada (ex presidentes de Bolivia), Felipe González (ex primer ministro de España), Václav Havel (ex presidente de la República Checa) y José María Aznar (ex primer ministro de España), entre muchos otros.

En el final, el
“smart power” fue lo bastante inteligente para engañar a los que hoy se abrazan y celebran “el fin de la crisis” en Honduras. Pero para la mayoría del pueblo latinoamericano la victoria del “smart power” de Obama/Clinton en Honduras significa una sombra muy oscura y peligrosa que se nos acerca. Apenas iniciativas como el ALBA estaban logrando la independencia en América Latina del poder estadounidense. Por primera vez, los países y pueblos se levantaban en colectivo con dignidad y soberanía para determinar sus propios futuros. Y llegó Obama con su “smart power” y golpeó al ALBA, debilitó la integración latinoamericana y aplastó cualquier pensamiento de independencia y soberanía en el patio trasero de Washington.

Arrodillados y entregados ante Washington, “fue resuelta” la crisis en Honduras, la misma que se había fomentado en el norte. Ahora, se habla de Paraguay, Nicaragua, Ecuador y Venezuela, donde cada día aumenta la subversión, la contrainsurgencia y la desestabilización. El pueblo de Honduras sigue en resistencia, a pesar del “acuerdo” entre sus gobernantes. Su insurrección y compromiso con la reivindicación de sus derechos es el símbolo de la dignidad. La única manera de derrotar a la agresión imperial –que sea inteligente o que sea bruta– es a través de la unión e integración de los pueblos, a todo nivel.


“Lo ilegal lo hacemos de inmediato. Lo inconstitucional tarda más tiempo.” (Henry Kissinger).

Fuente:
http://www.aporrea.org/tiburon/a89386.html