sábado, 25 de junio de 2011

VENEZUELA
El Rodeo: Estado, mafias, revolución


Rebelión...25/06/2011

1. El lunes 15 de abril de 2002 caminaba hacia el trabajo, por el bulevar de Sabana Grande, cuando pasé por el lado de un buhonero que gritaba exultante, difícil saber si en plena faena o como agitador político: "¡Cons-ti-tu-ción-de-la-Re-pú-bli-ca-Bo-li-va-ria-na-de-Ve-ne-zue-la-Pa-que-se-la-le-an-y-se-la-a-pren-dan!". Aquel librito azul, quién lo diría, lo habíamos defendido hasta con los dientes, nos lo habían arrebatado, había sido arrojado a la hoguera sangre y plomo mediante, y habíamos logrado rescatarlo por obra y gracia de una insurrección popular, todo durante los cuatro días precedentes. Es seguro que aquel lunes el librito azul olía a victoria, a trasnocho, a juerga popular, a ¡Volvió-volvió-volvió-volvió! Es seguro que aquel día todas sus letras brincaban y bailaban y todas decían lo que tenían que decir.

2. Si hay quien por conveniencia, distancia o traición dejó de creer en aquel librito, ese es su problema. Yo sigo creyendo en su promesa, en el horizonte que dibuja, en su potencia, librito imperfecto como toda obra humana, pero suficiente como para dar la pelea en el terreno que sea.

3. Nuestra Constitución habla de Estado democrático y social de derecho y de justicia; exige al Estado garantizar una justicia gratuita, accesible, imparcial, idónea, transparente, autónoma, independiente, responsable, equitativa y expedita, sin dilaciones indebidas, sin formalismos o reposiciones inútiles; compromete al Estado a proteger la vida de las personas que se encuentren privadas de su libertad, como procesados o condenados, cualquiera fuere el motivo.

4. A propósito de los sucesos en El Rodeo, de la muerte de veintiún presos y un familiar como consecuencia del motín del domingo 12 de junio, y sobre todo a partir de la operación que ejecuta la Guardia Nacional desde el viernes 17, ha ganado fuerza el discurso sobre la necesidad de que el Estadorecupere el control o restaure el orden de las cárceles.

5. Imposible esquivar la pregunta: ¿el Estado alguna vez ha dejado de tener el control sobre las cárceles? Nunca.

6. En las cárceles impera el orden impuesto por el Estado. De hecho, este status quo carcelario devela parte de la lógica de funcionamiento del Estado venezolano, y resume el conjunto de relaciones de fuerza sobre las que éste se funda.

7. Las imágenes de lo incautado en El Rodeo 1 ofrecen una pista del tipo de orden que prevalece en las cárceles: se trata, sin duda, de un orden fundado en la violencia. ¿De una violencia ejercida por quiénes y contra quiénes? Las armas y las drogas incautadas sólo han podido ingresar el penal con el concurso activo o la complicidad, según se trate, de funcionarios y efectivos, civiles y militares, que hacen parte, junto con otros actores del sistema penal, de las mafias carcelarias. El de las cárceles es un negocio lucrativo, violento, criminal hasta la abominación, que beneficia a una compleja trama de funcionarios y efectivos, a una pequeña parte de la población penal, y afecta no sólo a la mayoría de los presos, sino a los funcionarios y efectivos que han pretendido enfrentarlo.

8. Habría que preguntarse si el status quo que impera en las cárceles, incluyendo la regularidad de los motines de presos que se disputan el control interno, no es la vía más expedita para garantizar la despolitización del conflicto, es decir, para evitar que los presos se organicen y luchen por sus derechos. Se trataría de un status quo que garantiza el control político sobre la población penal.

9. Si la vieja clase política opositora, que creció y se hizo fuerte al amparo de ese Estado criminal, violento y mafioso, hoy se pretende defensora de los derechos de los presos contra los atropellos del gobierno, no es porque le importe el destino de los presos. Lo que busca es retomar el control del gobierno en 2012, y recuperar todo el terreno perdido dentro del Estado. Para eso, debe adoptar una estrategia de desgaste: denunciar la ineficiencia de la gestión gubernamental. Si los medios privados entrevistan a los familiares de presos no es porque entiendan o se solidaricen con su rabia o su dolor, sino porque es preciso introducir todas las fisuras posibles en el seno del pueblo pobre, allí donde se concentra la base social de apoyo a la revolución bolivariana. Se trata, por cierto, de una impostura que les puede resultar cara: es sabido que el antichavista promedio es más proclive al populismo punitivo: tolerancia cero, plomo al hampa, etc. No conviene mucho exponerse tanto junto a los "miserables".

10. Contra este Estado criminal, violento, mafioso, anti-popular, insurgió la revolución bolivariana. Mal podríamos aparecer ahora como defensores de esa máquina infernal y despótica que engulle y escupe pobres, que criminaliza y produce criminales, tal cual las cárceles.

11. Todo discurso que disimule o silencie la realidad brutal de las mafias carcelarias (quiénes la componen), que silencie, invisibilice o criminalice a los familiares de presos, es un discurso funcional a la preservación del status quo en las cárceles; equivale a una defensa, de hecho, del aparato de Estado que hemos heredado, ese enemigo acérrimo de la revolución bolivariana, que bloquea e intenta neutralizar, en todos los frentes de lucha, la radicalización democrática de la sociedad venezolana.

12. Dicho discurso, que se ha colado en los medios públicos, es un serio obstáculo a los esfuerzos que actualmente realizan el gobierno bolivariano y otros poderes del Estado para controlar, efectivamente, la situación en El Rodeo 2 mediante el uso proporcional de la fuerza, pero también para crear otra institucionalidad penitenciaria y, más allá, para construir un sistema penal acorde con los principios constitucionales. Para quienes, dentro del chavismo, se han hecho portavoces de este discurso, no estaría de más una lectura de la Constitución Bolivariana. A ver si aprenden algo, diría el buhonero.

13. Por último, no habrá solución posible sin escuchar a los presos. Tal es el abc de la política revolucionaria: pueblo/sujeto, protagonista, que participa y tiene voz y rostro. ¿O acaso los presos no son pueblo?

viernes, 24 de junio de 2011

Las lavanderías de Wall Street


Página 12...(24/06/2011)


Se puede pasear por Queens y encontrar decenas y decenas de lavanderías sin un solo cliente en toda la jornada y en ninguna otra jornada. Suelen ser negocios modestos, atendidos por una sola persona que no frecuenta a los vecinos. Nada que ver con los imponentes edificios de los bancos de Wall Street, que tampoco lavan ropa: se dedican a otra clase de limpieza.

Es difícil calcular el volumen de dinero lavado que entra en el flujo financiero mundial. En 1996 el FMI afirmó que ascendería del 2 al 5 por ciento del total, pero hay estimaciones actuales que superan esa aproximación. El distinguido economista John Walker propone, con base en un modelo económico comparativo de bases de datos internacionales sobre el crimen organizado, que su monto anual es de unos 2,85 billones de dólares (www.economywatch.com, 14/6/11). De los cuales: un 46,3 por ciento se higieniza en el sistema bancario de EE.UU. y, mucho menos, en los de Italia (150.000 millones de dólares) y Rusia (147.000 millones), y a más distancia todavía en los de Alemania, Francia, Rumania, Canadá y otros países de Occidente y Asia. Como siempre, la gran potencia del Norte en primer lugar.

Walker sostiene que esto es posible porque los intentos de combatir el lavado de dinero son ineficaces y las penalizaciones legales estadounidenses, muy leves. Cuando se aplican.

Un caso muy notable y muy notorio es el de la financiera Wachovia que, por intermedio de la mexicana Casa de Cambio Puebla, inyectó en el mercado financiero 378.400 millones de dólares sólo en el período 2004/2007 (www.huffingtonpost.com, 14/7/10). ¿El castigo? Una multa de 160 millones de dólares, aunque las autoridades judiciales de EE.UU. calificaron de “operaciones delictivas continuadas” las actividades de Wachovia. A juicio del especialista Daniel Hopsicker, la lenidad de la sanción habla “del trato preferencial acordado a algunos participantes en el comercio internacional de drogas” (www.alternet.org, 12/6/11).

Un estudio del año 2009 de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Unodc) reveló que los bancos violan la gran mayoría de las normas establecidas para prevenir el lavado de dinero: “En momentos en que se produce la quiebra de grandes bancos –subraya–, los banqueros parecen creer que el dinero no tiene olor. Los ciudadanos honestos, que se enfrentan con esfuerzo a este tiempo de dificultades económicas, se preguntan por qué no se confiscan las utilidades del delito, que se convierten en propiedades, automóviles, yates y aviones ostentosos” (www.unodc.com, 24/6/09). Y aun en otras cosas, claro.

Una posible respuesta a esa pregunta provino del Dr. Antonio María Costa, entonces subsecretario general de la ONU y director ejecutivo de la Unodc: “Los miles de millones de dólares del dinero de la droga mantuvieron a flote el sistema financiero cuando la crisis global llegó a la cima... eran el único capital de inversión líquido” del que dispusieron ciertos bancos al borde del colapso en el 2008 (www.guardian.co.uk, 13/12/09). Como consecuencia, la mayoría de los beneficios del narcotráfico ingresó al sistema económico mundial.

“Los préstamos interbancarios se financiaron con dinero procedente del narcotráfico y de otras actividades ilegales –agregó–. Hay evidencias de que algunos bancos fueron rescatados de ese modo.” El Dr. Costa contó con información de fuentes fidedignas, investigaciones y datos de varios servicios de inteligencia para asegurar que la posterior y “progresiva liquidez del sistema y el mejoramiento paulatino del valor de las acciones de algunos bancos (se tradujo) en que el problema (del dinero ilegal) se ha convertido en algo mucho menos grave de lo que alguna vez fue”.

Se podría sumar otro elemento a las consideraciones del Dr. Costa: es política oficial de la Casa Blanca no penalizar a los grandes bancos y Obama demostró que más bien hay que premiarlos. El experto Michael Smith lo explica claramente: “Ningún banco de EE.UU. ha sido enjuiciado por violar la ley de secreto bancario o cualquier otra ley federal (en la materia). En cambio, el Departamento de Justicia establece cargos en el marco de acuerdos de procesamiento diferido, por los cuales un banco paga una multa y promete no volver a violar la ley... Los megabancos están protegidos por una variante de la teoría ‘demasiado grande como para caer’. Fallar contra un gran banco podría... causar pánico en los mercados financieros” (www.bloomberg.com, 28/6/10).

Es conocido el involucramiento de la CIA en operaciones de narcotráfico, incluso hoy en Afganistán, convertido en el productor del 90 por ciento del opio que invade el mundo. Corren además rumores de que algunas familias estadounidenses de pro lavarían dinero “negro” en bancos de Wall Street y/o habrían invertido en el tráfico de drogas. Finalmente, Warren Delano, abuelo del ex presidente norteamericano Franklin Delano Roosevelt, acumuló una fortuna con el tráfico ilegal de opio de China. Tradiciones son tradiciones.

http://www.pagina12.com.ar/diario/contratapa/13-170201-2011-06-16.html


jueves, 23 de junio de 2011


La OTAN en una encrucijada en Libia


Asia Times Online...23/06/2011

A la OTAN se le acaba el tiempo para tomar algunas decisiones críticas sobre Libia, si todavía no lo ha hecho en secreto. La actual campaña se hace cada vez más desesperada, y comienza a atraer niveles intolerables de condena internacional; es difícilmente sostenible durante mucho tiempo, y si sigue al mismo ritmo, podría tardar muchos meses antes que Muamar Gadafi sea doblegado.

Eso, si se supone que esto último llegue a suceder. Porque, aunque Gadafi ha recurrido sobre todo a acciones defensivas como reacción ante bombardeos cada vez más feroces, también conserva sus cartas militares más importantes, y todavía puede ofrecer una resistencia significativa.

La alianza enfrenta alternativas binarias bastante simples, lo que prueba que la guerra no se desarrolla favorablemente para ella. Puede escalar aún más su intervención militar hasta llegar a una invasión terrestre, o puede imponer una partición del país entre Gadafi y los rebeldes. Irónicamente, el aluvión de informes que ha llegado de Libia alrededor de la semana pasada, subrayando la severidad de las desavenencias entre los principales participantes en los combates, puede reflejar cualquiera de los dos escenarios.

Gadafi parece creer que se prepara una operación terrestre; funcionarios rusos han estado hablando de ello desde hace un cierto tiempo, y hace poco otros países también han insinuado lo mismo.

La oferta de Gadafi, expresada la semana pasada por su hijo más destacado Said al-Islam, de realizar elecciones dentro de tres meses, y de renunciar si las pierde, [1] es una prueba de sus esfuerzos por evitar algo semejante.

Lo mismo vale para su actitud defensiva en las últimas semanas – aunque su ejército ha infligido graves bajas a los rebeldes, lo ha hecho sobre todo mediante emboscadas y utilizando artillería pesada contra el avance de unidades enemigos. Ha habido unos pocos contraataques, pero al parecer carecían de mucha energía y eran seguidos por rápidas retiradas.

El rechazo directo de la oferta del coronel por parte de los rebeldes, por otra parte, revela una confianza sorprendente. “Le decimos [a Saif al-Islam] que la hora ha pasado porque nuestros rebeldes están en las inmediaciones de Trípoli, y se unirán a nuestra gente y a los rebeldes en esa ciudad para desarraigar el símbolo de corrupción y tiranía en Libia”, dijo un portavoz rebelde de alta graduación a Al-Jazeera.

Desde todo punto de vista, esta declaración se no acerca en nada a la situación en el terreno. Hay actualmente tres frentes principales en Libia: En el este, cerca de la ciudad de Brega, en el oeste, entre el bastión rebelde Misrata y varias ciudades cerca de la costa en camino a la capital Trípoli, y más al oeste en las montañas.

Este último frente es el que ha presenciado recientemente los progresos más importantes de los rebeldes, pero se ha debido en gran parte al retiro de las fuerzas de Gadafi del área. En todo caso, los rebeldes de las montañas son muy diferentes del resto del bloque contra Gadafi; son bereberes, que casi indiscutiblemente luchan por más autonomía. La mayoría de los analistas cree que es poco probable que ataquen Trípoli, y Gadafi ha preferido dejarlos tranquilos por el momento, para concentrarse en amenazas más urgentes.

Los otros dos frentes han progresado lentamente en el mejor de los casos, en el caso de los rebeldes. A menudo reivindican éxitos, pero sus avances son frecuentemente revertidos a pesar de la cobertura de la OTAN, y sus bajas crecen. Docenas han sido muertos recientemente y cientos heridos solo cerca de Misrata; varios ataques contra Brega también fueron rechazados con fuertes pérdidas.

Mi evaluación anterior de que los rebeldes no podrían avanzar lejos por su falta de experiencia militar en condiciones no urbanas [2] es confirmada por las informaciones. “Tenemos una estrategia para terminar todo hoy, pero algunos de los combatientes piensan que se trata de un juego”, dijo aReuters un comandante rebelde el viernes. Sus palabras dos días más tarde sugirieron que las lecciones no son implementadas con la suficiente rapidez: “Hicimos un error hoy… Enviamos a los muchachos a pie delante de los vehículos”.

“Los rebeldes de Misrata perfeccionaron su capacidad en el combate en batallas callejeras a poca distancia”, escribe Reuters, “arrebatando el centro de la ciudad a las fuerzas pro Gadafi y luego haciéndolas retroceder en tres frentes para romper un cerco de artillería… Muestran menos éxito en terreno despejado”. [3]

La frustración de los rebeldes es evidente en sus frecuentes exabruptos contra la OTAN, en los que acusan a Occidente de no darles suficiente ayuda militar o financiera. Respecto a esta última, su ministro del petróleo Ali Tarhouni emitió una advertencia particularmente sombría hace unos pocos días. “Se nos está acabando todo”, dijo a Reuters. “Es un fracaso total. O no lo comprenden [las naciones occidentales] o no les importa. Nada se ha materializado todavía. Y realmente quiero decir, nada.”

“La economía en Libia oriental, de donde provenía gran parte del petróleo que convertía a Libia en un importante exportador de la OPEC, está en ruinas,” advierte Reuters. [4]

A pesar de las diatribas y los reveses, las bravatas de los rebeldes hacen juego con el permanente aumento de la participación de la OTAN en las operaciones. Helicópteros de ataque realizan misiones de combate; los rebeldes reciben casi abiertamente artillería pesada y entrenamiento para utilizarla, incluso a pesar de que los informes no mencionan de dónde proviene (la OTAN insiste en que solo suministra equipos no letales como ser blindaje corporal y equipos de comunicaciones).

La campaña aérea, en general, se ha hecho más atrevida y mortífera. Más y más ataques son realizados durante el día, y las bajas civiles aumentan. Durante los últimos días, los medios internacionales transmitieron horrendas imágenes de las secuelas de ataques de la OTAN contra complejos habitacionales.

Según el régimen de Gadafi, siete civiles fueron muertos por la OTAN el domingo y 19 el lunes (y más de 700 desde el inicio de la operación); la OTAN reconoció un “error” el domingo, mientras afirmó que la incursión del lunes atacó una instalación militar. La casa en cuestión pertenecía a un miembro del círculo íntimo de Gadafi, y los muertos fueron sus parientes.

Las bajas civiles amenazan con debilitar lo que queda de la legitimidad internacional de la operación, e imponer un fin abrupto de la misma en el futuro. “La OTAN pone en peligro su credibilidad; no podemos arriesgar la muerte de civiles”, advirtió el lunes el ministro de exteriores italiano Franco Frattini.

La presión internacional aumenta. La semana pasada, el presidente sudafricano Jacob Zuma se sumó al coro de voces que acusa a la OTAN de exceder su mandato. [5]

La alianza también enfrenta considerables presiones políticas y financieras en sus países. Los costes de la operación están aumentando, y son una carga considerable para los miembros individuales. En EE.UU., que ha jugado un papel crucial en la guerra, el gobierno del presidente Barack Obama enfrenta amenazas del congreso de que se corten sus fondos para la guerra,

Obama ha sido fuertemente criticado por ignorar la Ley de Poderes de Guerra, que estipula que un presidente que no ha recibido autorización del congreso para una operación militar debe concluirla dentro de 60 días, y que tiene 30 días adicionales para hacerlo. No solicitó ni recibió autorización y el plazo de 90 días venció la semana pasada.

Todo esto no agota los problemas de la OTAN. Nadie lo admitirá, pero es probable que a la alianza se le estén acabando los objetivos estratégicos importantes que sea legítimo bombardear. El aumento de bajas civiles y los ataques repetidos contra edificios vacíos, incluido el complejo Bab al-Azizia de Gadafi en Trípoli, apoyan esta hipótesis.

Además, es algo que usualmente sucede durante campañas aéreas prolongadas, y no hay motivo para creer que la guerra contra Libia sea algo diferente. Se necesita mucho esfuerzo, tiempo y recolección de inteligencia para identificar semejantes objetivos de alto valor, y solo unas pocas horas para bombardearlos.

La OTAN se ha mostrado cada vez más desesperada, y trata de aplicar el método de “conmoción y pavor” contra Gadafi mediante fuertes “mensajes” desde hace algún tiempo, y la simple aritmética indica que es probable que el conjunto de objetivos se esté acabando mucho más rápido que la posibilidad de volverlo a completar.

Objetivos tácticos como tanques e instalaciones de artillería también se hacen más y más difíciles de alcanzar debido a la mejora de las tácticas de Gadafi de ocultarlos en áreas pobladas y difíciles de bombardear.

En otras palabras, la OTAN enfrenta costes prohibitivos y ventajas dudosas si continúa con su actual estrategia. También Gadafi ha sido perceptiblemente debilitado, pero no parece estar ni remotamente cerca de un punto de rotura. Surge amenazadoramente la pregunta de lo que vendrá ahora: a la alianza occidental no le quedan muchas opciones.

No cabe duda que una campaña para matar al coronel desde el aire desde hace algunos meses no ha logrado su objetivo. Si eso no es posible, y ya que la alianza ha convertido en meta de su campaña el derrocamiento de Gadafi, el coronel solo tiene que sobrevivir en el poder para crear la percepción de que ha vencido (las guerras se libran en gran parte basadas en percepciones, como admiten abiertamente los expertos militares).

La cuestión principal es si la OTAN estará dispuesta a aceptar una derrota semejante – por ejemplo, imponiendo la división en dos de Libia y permitiendo que Gadafi gobierne la parte occidental – o si llegará a enviar fuerzas terrestres para deponerlo.

La especulación se desboca – desde una inminente invasión terrestre en los próximos días hasta complicadas iniciativas diplomáticas que involucran a miembros de la casa real, exiliada por Gadafi en 1969. La información fiable es escasa, pero la rápida proliferación de informes y especulación es de por sí reveladora.

Cuando las tensiones aumentan con tanta rapidez e información nueva aparece a un ritmo semejante, se puede suponer que se prepara el terreno para algo nuevo; sin embargo, es difícil de decir, a veces para los propios participantes, si vendrá más o menos violencia.

Tanto las concesiones como las amenazas pueden ser alardes – que apuntan a reforzar el apoyo internacional o la legitimidad de las partes respectivas, apuntalar una posición más ventajosa para negociaciones, o preparar al público para lo que sea.

Justo antes de dramáticos anuncios diplomáticos, dicen a menudo negociadores con muchos años de experiencia, hay usualmente un endurecimiento palpable de la retórica de ambas partes; para ambas es útil acceder en falso a las demandas de los partidarios de la línea dura de cada lado y advertir al otro de lo que sucedería si no cumple con sus compromisos. Esto también vale para el tiempo que precede de cerca a operaciones militares en gran escala, a menos que se quiera que el ataque sea sorpresivo.

A menudo, la verdadera amenaza de un derramamiento masivo de sangre es lo que termina por persuadir a ambas partes a negociar un cese al fuego; a veces, sin embargo, la amenaza se materializa. Cuesta predecir lo que sucederá en Libia, tal vez incluso para los que toman las decisiones.

Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens

Notas

1. Gaddafi son offers Libya elections, al-Jazeera, 16 June 2011.

2. Libya: The land of make believe, , Asia Times Online, 13 June 2011.

3. Inexperience costing rebels in advance on Tripoli, Reuters, 19 June 2011.

4. Libyan rebels blame West for lack of cash, , Reuters, 18 June 2011.

5. Libya: Jacob Zuma accuses Nato of not sticking to UN resolution, The Telegraph, 14 June 2011

Victor Kotsev es periodista y analista político residente en Tel Aviv.

miércoles, 22 de junio de 2011

Los expertos temen el plan israelí para balcanizar los Estados árabes


Uruknet...22/06/2011

Los acontecimientos de Libia han incrementado los temores de analistas egipcios y figuras políticas sobre la posible ruptura de la nación del norte de África en dos partes enfrentadas. Para apoyar la afirmación señalan un antiguo plan diseñado por Israel —con el apoyo de las potencias occidentales— para balcanizar a los Estados árabes de la región.

“Libia podría dividirse en dos, con Gadafi permaneciendo en el oeste del país y un gobierno "revolucionario" fiel a las potencias occidentales controlando el este”, según afirmó a IPS Muhammad al-Sajawi, destacado miembro del Partido de la Unidad Árabe, egipcio y que aún no ha sido legalizado.

Durante tres meses, Libia ha sufrido ataques aéreos sancionados internacionalmente por parte de la alianza occidental de la OTAN, lanzados con el objetivo declarado de apoyar el levantamiento popular contra el actual régimen de Gadafi. Las fuerzas "revolucionarias" con base en Bengasi controlan en la actualidad más de la mitad oriental del país, mientras que las fuerzas leales a Gadafi siguen controlando la mitad occidental desde la capital, Trípoli.

Sin embargo, el hecho de que la OTAN no haya podido desalojar al régimen de Gadafi por el momento a pesar de su abrumadora superioridad aérea ha llevado a muchos observadores locales a cuestionar las intenciones de la alianza occidental.

“La campaña occidental contra Libia no se puso en marcha para proteger los derechos humanos o fomentar la democracia”, afirma al-Sajawi. “Se puso en marcha con el objetivo de dividir Libia políticamente con el fin de impedir la unificación de tres Estados revolucionarios árabes, Egipto, Libia y Túnez, que conjuntamente podrían representar una amenaza a la dominación regional israelí.”

Walid Hassan, profesor de Derecho Internacional en la Universidad El Faro de Alejandría, está de acuerdo en su mayor parte,y sostiene que la OTAN —con el aliento de Israel— “espera sustituir a Gadafi con gobernantes leales a Occidente antes de proceder a dividir al país en pequeños Estados, como lo están haciendo en Iraq”.

“El principal objetivo es debilitar a “los Estados árabes del norte de África, que, de unirse eventualmente, representarían una amenaza potencial para los intereses israelíes y occidentales”, dijo Hassan a IPS. “La importante riqueza petrolera de Libia, por supuesto, constituye una segunda razón para la intervención”.

Al-Sajawi señala al legado centenario de balcanización de la región a manos de las potencias extranjeras.

“El 1916, el Acuerdo Sykes-Picot entre Gran Bretaña y Francia trazó fronteras artificiales en toda la región y fragmentó al mundo árabe en Estados-nación. En los últimos años, la campaña para balcanizar aún más al mundo árabe por parte de Israel y las potencias occidentales no ha hecho más que intensificarse”.

Los analistas egipcios se refieren a varias propuestas por escrito elaboradas a tal efecto por estrategas israelíes, la más conocida de las cuales es un tratado de 1982 titulado Una estrategia para Israel en la década de 1980”. Escrito por Oded Yinon, entonces un alto asesor del Ministerio de Exteriores de Israel, el ensayo insta explícitamente a fragmentar los Estados árabes de la región desde criterios étnicos y sectarios.

“El plan sionista de fragmentar políticamente el Oriente Próximo árabe a fin de mantener a los Estados árabes en un estado permanente de inestabilidad y debilidad se ha conocido bien en las últimas tres décadas”, Gamal Mazlum, general egipcio retirado y experto en materia de defensa, dijo a IPS.

Si bien el Documento Yinon no dedica mucho espacio a Libia, explica en detalle la necesidad de dividir a Iraq, Egipto, Siria y Líbano en pequeños e ineficaces Estados.

“La disolución de Siria e Iraq en áreas étnica o religiosamente únicas [...] es el objetivo primordial de Israel para el frente oriental a largo plazo”, escribe el autor. Para Yinon, siendo Iraq rico en petróleo y étnicamente diverso —lo que describe como “la mayor amenaza para Israel”— aquello constituye un objetivo esencial.

“En Iraq, una división en provincias siguiendo líneas étnicas / religiosas [...] es factible”, escribe. “Por lo tanto, existirán tres Estados alrededor de tres ciudades principales: Basora, Bagdad y Mosul, y las zonas chiíes del sur quedarán separadas de las suníes y de las kurdas del norte”.

En cuanto a Egipto, Yinon aboga por fracturar el país en “regiones geográficas distintas”. El establecimiento de un Estado copto-cristiano en el Alto Egipto, escribe, “junto a una serie de Estados débiles con un poder muy local y sin gobierno centralizado [...] parece inevitable a largo plazo”.

Yinon pasa a referirse a Sudán en términos similares describiéndolo como “el Estado más desmembrado del mundo árabe-musulmán actual [...] construido en torno a cuatro grupos hostiles entre sí: ​​una minoría árabe-musulmana suní que gobierne una mayoría no árabe africana, pagana y cristiana”.

Según Mazlum, las maniobras políticas llevadas a cabo en los últimos años por parte de Israel y las potencias occidentales —tanto de manera manifiesta como encubierta— parecen confirmar esta estrategia de balcanización.

“Israel y Estados Unidos han contribuido por igual a fragmentar Iraq fomentando la aparición de un Estado kurdo independiente e instigando la división entre suníes y chiíes. Y en Sudán, Israel ha contribuido activamente a la guerra entre el norte y el sur proporcionando a este último armas y entrenamiento militar”.

El Sur de Sudán se dispone a declarar la independencia del gobierno del norte de Jartum el próximo mes en una acción que oficialmente dividirá al país más grande de África en dos.

“A Israel le interesa fragmentar Sudán e instigar la violencia sectaria en Egipto para que éste afronte una crisis tanto en el frente interior como en el exterior”, señala Mazlum. “Israel y sus patrocinadores occidentales están decididos a mantener Egipto —la nación árabe más poblada, con diferencia— en un estado de debilidad permanente de modo que no pueda contribuir a la causa árabe en lugares como Palestina e Iraq”.

A principios de este mes, Muhammad Abbas, un destacado miembro del Consejo de la Coalición Revolucionaria de Egipto (CCR), alertó igualmente sobre una continua “conspiración” dirigida a fragmentar Egipto en tres pequeños estados. El CCR se compone de varios movimientos políticos que desempeñaron un papel prominente en la reciente sublevación de Tahrir, en Egipto.

“Esta conspiración forma parte de un plan más amplio para fragmentar los Estados árabes —como ha ocurrido en Sudán, como se está intentando en Libia y como se ha intentado en Iraq— con el fin de hacer que Egipto sea tan débil que la entidad sionista tenga garantías de seguir siendo la potencia dominante en el nuevo Oriente Próximo” sostiene Abbas, citado por el diario independiente Al-Shorouk el 4 de junio.

Traducido para Rebelión por Loles Oliván

martes, 21 de junio de 2011

Una demanda judicial revela existencia del máximo secreto de Israel: la producción de armas biológicas
El secreto mejor guardado de Tel Aviv


Al-Ahram Weekly...21/06/2011

Los conductores solo echan un vistazo al pasar a esa gigantesca estructura en las dunas al sur de Rishon Litsion al sudeste de Tel Aviv. Está prohibido salir de la carretera Tel Aviv-Rishon Litsion hacia la vía lateral que lleva a ese edificio, parapetado tras muros de hormigón equipados con sistemas de vigilancia y advertencia de última tecnología desarrollados por las industrias militares de Israel.

Esa estructura, parecida a una fortaleza, es el Instituto Israelí de Investigación Biológica (IIBR, por sus siglas en inglés) en el cual Israel desarrolla sus armas biológicas y químicas y se prepara para cualquier eventualidad de guerra biológica o química. Es la instalación militar de máximo secreto en Israel. Está tan estrictamente protegida por la censura militar que la prensa israelí tiene que buscar pedazos de información en fuentes occidentales que las pueden recibir, de modo muy intermitente, a través contactos especiales del Instituto.

La prensa israelí ha tenido libertad de acción solo una vez para discutir lo que sucede detrás de esos muros de alta seguridad. Fue el mes pasado, cuando Avisha Klein presentó una demanda contra la administración del IIBR por acoso y abuso emocional. Empleado desde hace tiempo en el Instituto, Klein ha servido en varios puestos, en uno de ellos como parte de un equipo para desarrollar una pomada para proteger la piel del gas mostaza. Pero sólo es uno de los numerosos detalles que han salido a la luz durante los procedimientos, que han esclarecido considerablemente la naturaleza y alcance del trabajo del Instituto.

El IIBR emplea a unos 300 científicos y técnicos en sus numerosos departamentos, cada uno de los cuales se especializa en un área específica de la investigación química o biológica orientada generalmente a la producción de armas químicas o biológicas. Se informa de que uno de esos departamentos, por ejemplo, desarrolló el veneno que fue utilizado por la tristemente célebre unidad de asesinatos del Mossad, Kidon, en su fracasado intento de eliminar al jefe del politburó de Hamás, Khaled Meshaal en 1997. A pesar de todo, por si todavía quedara alguna duda sobre la exactitud de esta información, publicada en Haaretz, nadie discute que la primera vez que se utilizaron productos del Instituto en una operación de asesinato fue a finales de 1977 cuando el primer ministro Menachem Begin ordenó al Mossad que asesinara a Wadie Haddad.

Líder del Frente Popular para la Liberación de Palestina, Haddad estaca acusado por Israel de ser responsable de varias operaciones terroristas, la última de las cuales fue el secuestro de un avión de pasajeros israelí de camino a Entebbe en 1976. Según un libro del periodista israelí Aharon Klein publicado recientemente, a Haddad le gustaban mucho los chocolates belgas. El Mossad obtuvo algunos de esos chocolates especiales, los revistió con un veneno de acción lenta e hizo que se los entregara a Haddad, que vivía entonces Bagdad, un funcionario iraquí agente del Mossad que se había hecho amigo de Haddad. Klein relata que la sustancia letal se desarrolló primero en el IIBR y que sus propiedades indetectables de acción lenta garantizaban que el agente y el instrumento mortal no se descubrieran.

Y por cierto, después de un deterioro gradual pero grave de su salud, a Haddad le llevaron a un hospital de Alemania Oriental que le diagnosticó leucemia y donde finalmente murió el 28 de marzo de 1978. La verdad solo salió a la luz 32 años después: la verdadera causa de su muerte fue un veneno producido por el IIBR.

No es improbable que el Mossad haya realizado numerosas operaciones asesinas de esta naturaleza, para no dejar huellas. En otras palabras, las muertes aparentemente accidentales de muchas personas que Israel consideraba amenazas pueden haber sido causadas en realidad por sustancias producidas por el IIBR. Es muy probable que el veneno que los agentes del Mossad inyectaron al dirigente de Hamás Mahmoud Al-Mabhouh en Dubai en febrero de 2010 procedieran del IIBR.

Según la información desvelada recientemente, el Instituto tiene un departamento especializado en la producción de vacunas contra armas biológicas. Uno de los temas principales de su investigación y desarrollo fue el ántrax, ya que Israel teme que los árabes y las organizaciones de resistencia lo utilicen contra él en una confrontación. El Instituto también tiene un departamento para desarrollar remedios para minimizar y contrarrestar los efectos de las armas químicas. El conjunto presenta un horroroso cuadro de una curiosa carrera química biológica, en la que el Instituto prácticamente compite consigo mismo para producir antídotos para las armas que desarrolla, o que teme que otros puedan utilizar contra Israel en un eventual enfrentamiento.

El IIBR trabaja en estrecha y plena coordinación con el ejército y los servicios de inteligencia israelíes, que suministran al Instituto sus listas de prioridades según sus predicciones de amenazas estratégicas. Por ejemplo, durante la cobertura de la demanda de Klein ha salido a la luz información de que hace muchos años el establishment militar israelí estaba preocupado de que los Estados árabes pudieran utilizar agentes químicos como el gas mostaza en un posible ataque contra Israel y, por lo tanto, instruyó al Instituto para que desarrollara una sustancia química que minimizara los efectos del gas. Como es de esperar, el Instituto se coordina estrechamente con cuerpo médico del ejército israelí, que recibe los antídotos y los distribuye a las fuerzas armadas según la demanda.

El Instituto también trabaja estrechamente con el Mossad y el Shin Bet, las agencias responsables de la mayoría de los asesinatos y operaciones de exterminio de objetivos árabes y musulmanes. También, ya que el Mossad y la unidad “Aman” de inteligencia militar son responsables de la recolección de inteligencia sobre el enemigo y presumiblemente monitorean programas de armas no convencionales en países árabes, instruyen al IIBR para que desarrolle las reacciones biológicas o químicas necesarias para esos programas.

Sin embargo, el IIBR tiene otro propósito aparte de desarrollar y producir armas y antídotos biológicos y químicos: Es un importante generador de ingresos en moneda fuerte. El sitio web de Haaretz informa de que: “El Instituto ha recibido un subsidio de cientos de millones de dólares para desarrollar una vacuna contra el ántrax”. El subsidio vino después de un ataque en EE.UU. por un terrorista local que desarrolló una variedad concentrada de esporas de ántrax y las envió a diversos objetivos individuales en EE.UU.; las vacunas que se pidieron al IIBR estaban destinadas para usarlas en EE.UU.

Más importante aún, el sitio web informa de que se ha utilizado a soldados israelíes para probar las vacunas, causándoles algún daño físico permanente. Los informes de la utilización, prohibida internacionalmente, de conejillos de indias humanos, causó indignación moral en Israel y agudizó las sospechas de que se haya puesto en peligro las vidas de soldados israelíes para lograr beneficios financieros por promover la seguridad de otro país, en este caso EE.UU.

El IIBR tiene un departamento de animales vivos, en el que conejos, cerdos, monos y otros animales se utilizan en experimentos. Y tal vez también seres humanos, a juzgar por las denuncias presentadas por soldados contra el Ministro de Defensa israelí después de que los utilizaron en experimentos con ántrax. Los soldados piden que los reconozcan oficialmente como como veteranos discapacitados y que les paguen las indemnizaciones correspondientes. El caso está en los tribunales, pero las FDI [ejército israelí] cediendo ante la presión de las familias de los soldados y la opinión pública, anunciaron recientemente que no volverán a realizar experimentos con soldados.

El primer ministro de Israel tras la fundación del Estado, David Ben-Gurion, fue quien ordenó la construcción del IIBR, basándose en la recomendación de una serie de científicos judíos. Durante su gobierno, de 1948 a 1963 (con la excepción de los años 1953-1955 cuando Moshé Sharet sirvió como primer ministro), Ben Gurion fue directamente responsable del Instituto y de cada detalle relacionado con él. Se prohibió al personal que revelara a cualquiera incluso el menor detalle, dato o información sin obtener primero la aprobación de Ben-Gurion. Eso se siguió aplicando incluso durante el período en el que Sharet estuvo en el poder, porque cuando ese primer ministro visitó el Instituto en 1954 los científicos tuvieron que disculparse por no poder mostrarle los programas en los que estaban trabajando.

Aunque muchos científicos han pasado un período dirigiendo el IIBR, se cree en general que el que ha dejado la mayor impronta es su actual director, Avigdor Shafferman. Éste, a quien se ha nombrado en la demanda de Klein, tiene la reputación de ser un individuo extremadamente activo, pero también muy estricto y que despide rápidamente a miembros del personal por motivos disciplinarios.

A pesar de todo, por significativos que sean los detalles que han salido a la luz en este vistazo fuera de lo común al funcionamiento del IIBR, se ha prestado poca atención a una verdad más amplia. Mientras la comunidad internacional acosa a un sinnúmero de países por realizar programas de armas convencionales que parecen nimios en comparación con el de Israel, se niega a mover un dedo para disuadira éste, lo que solo alienta la conducta beligerante y tiránica de Tel Aviv.

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Traducido del inglés para Rebelión por Germán Leyens

lunes, 20 de junio de 2011

Televisión no apta para consumo humano


Aporrea...20/06/2011

Se aproximan elecciones, que requieren medios, que significan televisión, la cual resulta el peor desastre económico, político, social y cultural de Venezuela.

En nuestro país existen tres grupos por encima de la Ley: los motorizados, la mafia de los casinos y la televisión.Todo el mundo sabe en Venezuela, salvo la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), que la masiva violación de normas y el irrespeto al público por parte de la televisión de señal abierta determinó la fuga de un 33% de la audiencia hacia la televisión por suscripción.

Salvo Conatel, todo el mundo conoce que la audiencia de la TV por suscripción dejó de crecer debido a la brutal violación de la Ley Resorte que este medio comete minuto a minuto.

Nadie ignora, excepto Conatel, que la televisión por suscripción en todas sus emisiones aumenta ilegalmente el volumen en los comerciales. Que en todas sus transmisiones de películas duplica el límite legal de 15 minutos de publicidad por hora. Que sus infomerciales acuñan cuatro horas seguidas, atropellando el límite legal de diez por ciento de la programación diaria. Que todos sus programas son inundaciones de prohibida publicidad por inserción, la cual asesina la imagen con superposiciones, letreros e interferencias extrañas a ella. Que en los canales Premium, que cobran por películas sin interrupciones, todas son estropeadas por inserciones ajenas a la imagen original. En los video clips concurren hasta cuatro inserciones simultáneas para destruirlos. En algunos espacios se inserta un estúpido logo publicitario que dura todo el programa o todo el día.

Para la televisión privada de señal abierta o de suscripción, un programa es una res muerta a ser destripada por una zamurera de comerciales, interrupciones, cuñas, inserciones e interferencias hasta provocar la huída de los damnificos, perdón, del público.

¿Por qué esa audiencia no escapa hacia la televisión de servicio público? En minucioso estudio de Mark Weisbrot y Tara Rutenberg se demuestra que los canales del Estado venezolanos captan para 2010 un 5,4% de la audiencia (“Television in Venezuela: Who Dominates the Media?” Mark Weisbrot and Tara Ruttenberg: Center for Economy Policy and Research of Washington).

Hay más de sesenta canales privados y doscientas operadoras de cable: que sólo cinco plantas públicas le conquisten tal porcentaje de la audiencia no está tan mal ¿Por qué no seducen el total?

¿Por qué no lideran todos los índices de audiencia, como lo hace en 2010 la estatal Corporación Radio Televisión Española desde que suprimió la publicidad? (Carlos Alberto Sánchez: “Sin publicidad, la audiencia ve más la televisión” 18-1-2010. www.adslzone.tv/.../sin-publicidad-la-audiencia-ve-mas-la-television/ ).

La respuesta nos la podría dar Earle Herrera, animador de “El Kiosco Veraz”, prestigioso espacio dominical de entrevistas, críticas y comentarios.

Varias veces vimos a Earle protestar en vivo y en directo, con el ánimo más que alterado, contra el diluvio de interrupciones, cortes y “pases” que despedazaban su espacio.

Todo el que haya visto algún programa de la televisión pública ha experimentado lo mismo: el espacio audiovisual es una incontrolable anarquía en la cual cortes, pases, interrupciones, cintillos, avances y logos irrumpen por todos lados como motorizados atropellando la emisión y la audiencia hasta asesinarlas.

Esta merienda de locos es cualquier cosa menos socialista: es la proclamación del más ramplón pajarobravismo, en virtud del cual el último alcalde que inauguró un poste de luz o la penúltima burócrata que se antoja de declarar algo se sienten autorizados a sabotear el trabajo de los comunicadores y la paciencia del público que los sintoniza.

Desesperado por el irrespeto a su trabajo, Earle Herrera cerró definitivamente su “Kiosco Veraz”. Quizá razones parecidas movieron a Ernesto Villegas a abandonar su programa matinal. Otros comunicadores me confían que están a punto de seguir el mismo camino.

El ancla de uno de los programas de mayor audiencia opina que los gerentes que interrumpen o interfieren los programas con banalidades carecen de la capacidad de evaluar los contenidos: son como la directiva de un hospital que ordenara a todo el personal interrumpir una operación de corazón abierto para dedicarse a atender a una señora con una espinilla.

Cuando la audiencia protesta, es normal: para eso se la maltrata. Cuando protesta el gobierno, es justificado: es su castigo por no aplicar la Ley Resorte. Pero cuando protestan los comunicadores, es que algo pasa.

¿A quiénes necesitará el proceso bolivariano: a sus mejores comunicadores y el público que atraen, o a los saboteadores de programas que ponen en fuga la audiencia hacia los canales de la competencia?


Todo depende de unas elecciones venideras que dependen de unos medios que se fundan en una televisión que no es apta para consumo humano.
Y tan fácil que sería aplicar la Ley Resorte.


PD: Fue conferido el Premio Aníbal Nazoa 2011 a Luis Britto García por su columna Pare de Sufrir en Últimas Noticias y su blog.


Fuente: http://aporrea.org/medios/a125359.html